El 1x1 de los jugadores del Eibar ante el Andorra

De vuelta en el once tras siete jornadas ausente, el portugués se encargó de originar la acción que propició el empate.

Desgraciado. Se desesperó ante el penalti que el árbitro le señaló al entender que tenía el brazo extendido cuando le golpeó un disparo de Scheidler desde fuera del área.

Concienzudo. Se afanó en firmar asistencias como la que Stoichkov aprovechó para lograr el 1-1.

Oscuro. Echó por la borda el buen trabajo que había realizado en la primera parte al ser expulsado por una doble amarilla en solo un minuto tras el descanso.

Moderado. No termina de hacerse con el mando del equipo.

Incierto. Le costó arrancar, pero cuando lo hizo sirvió centros como el que Tejero remató demasiado cruzado mediada la primera parte.

Deslucido. Aún sin brillar, participó de manera decisiva en el gol del empate.

Imprescindible. Además de anotar el tanto del empate a pase de Cristian, forzó el autogol de Samper con su presión.

Aplicado. Intentó sin éxito marcar por tierra, mar y aire.

Atropellado. El Andorra marcó y tuvo más opciones tras su salida.

Amarrado. Obligado a defender, sin poder salir al ataque.

Torpe. Frustró una contra final con un mal pase.

Resulta casi imposible que pueda ejercer de revulsivos disponiendo solo de escasos segundos.

Al igual que al pucelano, no le dio tiempo a demostrar nada en lo poco que pisó el césped.