Vecinos de Egia denuncian la amenaza de desahucio de sus viviendas

Vecinos del número 22 de la calle Egia de Donostia se han movilizado para denunciar la amenaza de desahucio por parte de la empresa semipública Sareb (Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria) junto con una de sus principales gestoras, Haya Reale Estate. Doce vecinos afirman que les han advertido de que impulsarán lanzamientos a medida que se extingan los contratos actuales.

Entre las afectadas se encuentra una mujer de 87 años. Lleva cinco años en su vivienda y tras fallecer su marido hace un año, el cual era el titular de la casa, no le renuevan el contrato y no puede empadronarse en su hogar. A pesar de ello sigue pagando el alquiler en el mismo formato de siempre. Asimismo, dos familias con menores se encuentran en situación de desconcierto, ya que no saben con exactitud si sus contratos de alquiler volverán a ser renovados por el Sareb.

Otro de los afectados afirma que han recibido una notificación por la que les aumentan el alquiler en casi un 30% de su precio actual, por lo que insiste que no podrá hacer frente al pago que se le está pidiendo.

La asamblea de Egia 22, el Sindicato de Inquilinas de Donostialdea y muchas pequeñas empresas de la zona les han mostrado su apoyo e insisten en que esta situación se solucione. El 30 de abril realizarán una manifestación por el barrio de Egia.

En rueda de prensa en el Consistorio de la capital guipuzcoana, vecinos de este inmueble, junto a representantes del sindicato y la asamblea, arropados por representantes de los grupos municipales de EH Bildu y Elkarrekin Donostia, han dado cuenta de su propuesta de acuerdo para acabar con la situación de «incertidumbre» que padecen estos inquilinos y la solicitud de reunión urgente, que han registrado, con el Gobierno municipal, liderado por el alcalde, Eneko Goia, y los grupos municipales.

Al respecto, han anunciado que EH Bildu y Elkarrekin Donostia ya les han trasladado su «predisposición» a colaborar. Según han señalado desde el sindicato de inquilinos de Donostialdea, hace medio año que iniciaron un seguimiento de las propiedades verticales de la ciudad y localizaron «122 bloques con cinco viviendas o más del mismo propietario», es decir «al menos 610 viviendas en manos de grandes tenedores». Han agregado que en el caso del número 22 de la calle Egia, Sareb compró cinco viviendas del bloque en las que viven arrendadas cuatro familias.

Tras denunciar los «desalojos silenciados en masa», una «práctica habitual de fondos buitre», ahora por parte también de «una entidad pública», han censurado que «la especulación inmobiliaria se sigue abriendo paso, incluso con fondos públicos», en la ciudad. En este sentido, han destacado que desde 2012 únicamente el 2% de las viviendas de Sareb se han vendido con fines sociales.

Los inquilinos de Egia 22 han pedido a las instituciones, en especial al Ayuntamiento, una «solución» ante su situación de «desolación, abandono y desinformación». Han criticado la «nula voluntad» de los gestores de Sareb para ello y les han pedido que «se sienten a dialogar».