El Topo circula frente a las viviendas del paseo de Errondo, que sufren las molestias que genera el tráfico ferroviario. USOZ

Pantallas laterales o una cubrición ligera son las alternativas al ruido del Topo en Errondo

El Gobierno Vasco encarga el estudio de posibles medidas para reducir las emisiones sonoras, además de una actualización del proyecto para soterrar las vías

Jorge F. Mendiola

San Sebastián

Sábado, 5 de noviembre 2022, 07:21

El Gobierno Vasco prevé aprobar la próxima semana la licitación para contratar el estudio de alternativas de integración urbana de la línea de Euskotren en ... el tramo Morlans-Anoeta, documento básico sobre el que se empezará a trabajar en la búsqueda de soluciones al problema del ruido que sufren los vecinos del paseo de Errondo, en Amara Berri. Con un importe de 125.000 euros y un plazo de redacción de seis meses, el equipo redactor trabajará, entre otras, en dos posibles actuaciones.

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Por un lado, se valora la opción de acometer un apantallamiento lateral de la trinchera ferroviaria mediante «elementos de estética y diseño acordes al entorno». Por otro, se analizará la posibilidad de realizar una cubrición ligera de la vía «en el mayor tramo posible», tal y como se recoge en el dictamen con el que se lanzará el concurso público.

Asimismo, se procederá a actualizar los datos técnicos y económicos del proyecto de soterramiento existente, que según recuerda la portavoz del PSE, Marisol Garmendia, «estaba contemplado pero fue desestimado en legislaturas anteriores, cuando el PNV tenía la responsabilidad en el Departamento de Transportes del Gobierno Vasco», hoy encabezado por el también socialista Iñaki Arriola.

El estudio de alternativas parte de la base del «cumplimiento normativo a nivel de emisiones sonoras» en este tramo del Topo, pero la segunda teniente de alcalde explica que «somos sensibles a las quejas de los vecinos del paseo de Errondo y hemos presionado al Gobierno Vasco para que acelere los trámites». «Tras varias reuniones con el viceconsejero de Infraestructuras y Transportes (Pedro Marco de la Peña), ha sido posible adelantar la programación y que el estudio de alternativas se licite ya y pueda iniciarse cuanto antes», subraya Garmendia.

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Transportes

«Somos sensibles a las quejas del vecindario y hemos presionado para acelerar los trámites»

El equipo redactor deberá diseñar las alternativas y cuantificarlas económicamente para conocer qué presupuesto sería necesario para llevarlas a la práctica. Garmendia afirma que la decisión final tendrá que ser «fruto del consenso interinstitucional». «Habrá que llegar a un acuerdo entre el Gobierno Vasco y el Ayuntamiento para consensuar la mejor solución para ponerla en marcha y también cofinanciarla», apunta.

La mayor afección, en la curva

El último mapa del ruido de la ciudad de Donostia, publicado en junio, señala que «en las líneas de ETS (Euskal Trenbide Sarea) la mayor afección se da en la curva del paseo de Errondo». Una situación que afecta a los vecinos de Amara y para la que llevan tiempo pidiendo soluciones, siendo el soterramiento del tramo Morlans-Loiola la más deseada para acabar con las molestias.

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Los residentes de este ámbito se dirigieron en verano al consejero Arriola para conocer las posibilidades de que esta obra se pueda realizar, a lo que el responsable autonómico respondió con el compromiso de que su departamento estudiaría encargar el informe para soterrar la vía entre Morlans y Anoeta, mientras que el tramo en dirección Loiola queda a la espera de las operaciones que se realicen al construir el intercambiador.

Pasadas legislaturas

«El soterramiento estaba contemplado pero fue desestimado», recuerda la edil del PSE Garmendia

En el Pleno de mayo, desde el gobierno municipal se avanzó que el soterramiento de la línea es «técnicamente posible», pero «la complicación es cómo se hace sin interrumpir el servicio». Para soterrar este tramo del Topo, como se ha hecho en otras ciudades, habría que habilitar una vía alternativa, normalmente en paralelo a la vía actual, para mantener el paso de trenes mientras se soterra la línea. Esto significa que habría que construir un paso provisional de trenes excavando en el monte u ocupando el vial del paseo de Errondo, incluidos la acera y el bidegorri. La obligación de mantener el paso del Topo mientras se hiciera este soterramiento deriva de que, después de haber hecho una inversión de esta cuantía –en la pasante–, proponer un proyecto que interrumpa el servicio «sería darnos un tiro en el pie», añadió el alcalde, Eneko Goia.

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