Dos meses de asedio antes del incendio y el saqueo
1813. Donostia recrea hoy los trágicos episodios bélicos de hace 212 años entre tropas ocupantes francesas y 'libertadores' anglo-portugueses que casi acaban con la ciudad
Donostia vivirá hoy una nueva jornada de recreación histórica. Los acontecimientos bélicos de hace 212 años, que casi acaban con la ciudad, se recordarán en las calles de la Parte Vieja. Ocupantes y 'libertadores' lucharán a golpe de artillería y bayoneta y los descendientes de aquellos donostiarras honrarán la memoria de sus antecesores mediante diferentes actos, que finalizarán con la calle 31 de Agosto envuelta en silencio y a la luz de las velas, evocando el fuego que la destruyó casi por completo aquel verano de 1813.
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El 31 de agosto fue cuando se produjo el asalto definitivo de las tropas anglo-portuguesas para acabar con el bastión francés que llevaba 5 años al mando de la ciudad. Pero el asedio militar de San Sebastián comenzó dos meses antes y el saqueo posterior se prolongó meses. 51 donostiarras fueron asesinados y 184 resultaron heridos, violaciones aparte, y el tifus y el cólera acabaron con la vida de 1.500 ciudadanos, según las investigaciones de José María Leclercq, plasmadas en el libro 'Aquel verano de 1813'. El gráfico que acompaña esta información ilustra cómo fue este episodio de nuestra historia que marcaría el devenir de la ciudad gracias a la firme voluntad de reconstrucción de los supervivientes de la tragedia.
El 28 de junio, justo una semana después de que las tropas francesas sufrieran una dura derrota en Vitoria, comenzó al asedio a San Sebastián, una ciudad fortificada, tomada por 3.000 militares franceses y ceñida a lo que hoy es la Parte Vieja. Las tropas inglesas atacaron desde Aiete y tomaron posiciones en Ulia. El primer intento de asalto fallido fue el 25 de julio por la esquina que hoy identificamos como la Bretxa. La batalla causó 600 muertos, sobre todo entre los aliados. El 27 de agosto los ingleses toman la isla y preparan el asalto final a la ciudad a base de ataques de artillería desde Aiete, Ulia y también desde lo que hoy conocemos por Gros.
Los aliados logran el día 31 romper la muralla en varios puntos y entran finalmente a base de sangre y fuego, con los franceses en retirada hacia el castillo de la Mota, donde capitularían el 8 y 9 de septiembre. En aquel verano cayeron en Donostia 72.000 proyectiles de artillería. San Sebastián fue pasto de las llamas y de los saqueos protagonizados por quienes vinieron a liberarla y que veían a los donostiarras como colaboradores de los franceses.
Aquel triste episodio se rememorará hoy en las calles con un intenso programa de actos que comenzará con una misa solemne en la basílica de Santa María (11.30 h), seguida de una ofrenda floral en Portaletas (12.45 h). Por la tarde se revivirá el acercamiento de las tropas inglesas desde la Zurriola (16 h) hasta la plaza Zuloaga, donde habrá un reconocimiento a Médicos Sin Fronteras (18 h). El Boulevard será escenario a las 19 h de una recreación histórica con minuto de silencio y la interpretación de la Martxa Primitiva de la ciudad. Por la noche, tras el repique de campanas, se escenificará la quema de la ciudad en el paseo de los Curas y la calle 31 de agosto, escenario de una procesión cívica con la participación de coros, txistularis y dantzaris.
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