«Nos han reventado el escaparate y se han llevado tres bicis de 1.700 euros cada una»

La primera detención se produjo en las inmediaciones de la plaza de Euskadi, donde los agentes detectaron a un sospechoso de estar implicado en los hechos. «Por las huellas detectadas en las zapatillas, como algún resto de cristal», se cercioraron de que era uno de ellos, según relataron fuentes municipales a este periódico. Posteriormente, en la calle Santa Catalina vieron cómo un segundo individuo salía del interior del Más Qué Café, cuya puerta también estaba forzada. Los policías procedieron a detenerlo y vieron que portaba consigo una de las bicicletas robadas. Otra bici apareció cerca de la plaza de Euskadi. La operación tuvo una duración de una hora aproximadamente y los detenidos fueron trasladados a dependencias de la Guardia Municipal en Morlans, donde se realizaron las habituales diligencias correspondientes para, una vez concluidas, ponerlos a disposición judicial.

Luis Miguel García, CEO de Lurauto concesionarios (BMW y Mini), aún sin creerse lo ocurrido, explica que «no ha habido grandes daños en el establecimiento». Con todo, hablamos de bicicletas de un importe considerable, valoradas en 1.699 euros cada una –5.097 euros en total–, de las cuales se han recuperado dos y se sigue buscando la tercera. «También han robado un portátil», agrega García, que añade por el vídeo que aportan las cámaras de seguridad que en el local entraron «tres personas pertrechadas con mochilas».

García confiesa que será difícil que la cristalera, de unos cinco metros de longitud, se recoloque «antes de hoy» y explica que los individuos no rompieron la luna, sino que la deformaron «por el efecto rebote, por la oscilación y la onda cada vez más grande que se genera en cada impulso que se realiza para adelante. Me fastidia la impunidad con la que actúan estas personas. Hace una década estas cosas no pasaban en Donostia».

Jorge Espinosa, del concesionario, aseguró que la alarma saltó a las «23.50 y nos llamó la Ertzaintza. Así como en otras ocasiones no había pasado nada, esta vez sí ha sido por algo importante. Es el tercer robo que sufrimos y, en este caso, es más molestia que otra cosa». Las dueñas del Más Qué Café, por su parte, inaugurado hace una semana, aseguraron que el local sufrió la «rotura de un cristal». También les arrebataron dos móviles, que luego recuperaron.