Árbol de gran porte talado en Amara por su peligrosidad. D. U.

El apeo de árboles peligrosos en 25 puntos de Donostia arranca en febrero

El consistorio talará o podará 350 ejemplares que por su estado suponen un riesgo para el tráfico y los viandantes

Jorge F. Mendiola

San Sebastián

Miércoles, 8 de enero 2025, 06:41

La Junta de Gobierno Local aprobó ayer adjudicar a la empresa Construcciones Moyua el contrato de las obras correspondientes al proyecto actualizado de actuaciones en ... los árboles peligrosos en el ámbito urbano, con un precio de 440.123 euros y un plazo de ejecución de un año. Los trabajos sobre el terreno comenzarán a lo largo del mes de febrero.

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Según explicó ayer el alcalde, Eneko Goia, en este proyecto se han definido una serie de actuaciones a ejecutar en el arbolado de 25 diferentes enclaves de la ciudad (avenidas, parques y calles) de casi todos los barrios, evaluando el riesgo que representa para el tráfico, los viandantes y los edificios contiguos. A su vez, se proponen soluciones para mitigar su peligrosidad: la poda, el apeo o el control de tracción natural.

Dos empresas se presentaron al concurso público impulsado por el consistorio para hacerse con este contrato. Moyua obtuvo la mejor calificación al ofrecer una baja del 28% respecto del precio de salida, que ascendía a 611.000 euros, IVA incluido. Su puntuación total fue de 97 sobre 100. La otra licitadora, la UTE Broker Loragaintza-Gaimaz, quedó en segundo lugar con 72,18 puntos. Hubo una tercera propuesta a cargo de la firma Lizelan SL, pero la Mesa de Contratación determinó la exclusión de la misma.

El concejal de Mantenimiento y Servicios Urbanos, Carlos García, informa de que los ejemplares afectados rondan los 350 y, aunque la mayoría tendrán que ser talados, en otros casos bastará con aplicar reducciones de copa. El delegado del PSE apunta que los espacios donde se realizarán las actuaciones más importantes por el número de árboles intervenidos y por el presupuesto empleado son paseo Arrapabide (Zubieta), avenida de Tolosa, parque Cristina Enea, aparcamiento del Hipódromo, Lourdes Txiki, plaza Gipuzkoa y ascensor inclinado de Larratxo.

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García detalla que en la evaluación del riesgo que presenta un árbol influyen dos factores: el estado y madurez de un árbol y las características de la zona en la que crece, ya que «un ejemplar puede estar enfermo pero no suponer un riesgo».

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