Orio B se proclama virtualmente campeón de la ARC-2 y vuelve a la categoría de plata

Este domingo el bote amarillo consiguió una nueva bandera en Hondarribia, la séptima en las ocho disputadas en lo que va de temporada. Los de Gorka Toledo volvieron a demostrar que son los claros dominadores de la categoría en la última regata en línea del curso. Las dos pruebas que quedan por remar serán en formato de contrarreloj individual en Pasaia y Bilbao.

En proa de regata desde el inicio fueron los primeros en completar la primera ciaboga en la zona exterior del campo de regateo. Con una ventaja en la primera maniobra de tres segundos sobre Astillero, seis sobre Portugalete y siete sobre Donostiarra, se centraron en hacer el mejor tiempo posible hasta el final.

Con el bote amarillo prácticamente inalcanzable, la lucha en el mar se centró en las posiciones de playoff. Donostiarra poco a poco fue recortando segundos, y aunque giró última en las dos primeras ciabogas, igualó a Astillero en la tercera y superó a Portugalete en una excelente recta final. Los de Kaiarriba terminaron segundos a 12 segundos, entra en posiciones de playoff, Portugalete a 13 y Astillero a 23.

En la primera tanda, tras una primera salida nula que tuvieron que repetir, San Juan, Hibaika y Mutriku pelearon para ser la mejor del primer turno. Hibaika fue el primer bote en completar el primero de los cuatro largos, marcando un tiempo en la ciaboga de 5:30, sacando una ventaja de cuatro segundos a Mutriku y de seis a San Juan. Una diferencia que los entrenados por Josetxo Arrizabalaga fueron ampliando ciaboga a ciaboga. Finalmente, los de Errenteria marcaron un tiempo de 22:04,34. San Juan terminó a 16 segundos y Mutriku volvió a ser colista, en esta ocasión a 25 segundos.