Los campeones, condenados a una crono

Esos dos sábados previos a la gran cita congregan en el muelle a la mayor parte de los protagonistas y a muchos aficionados y curiosos. No sucedió este sábado. La pertinaz lluvia que empapó Gipuzkoa durante toda la jornada provocó que muchas embarcaciones prefirieran realizar en sus lugares de origen ese último entrenamiento y apenas fueron seis las embarcaciones que acudieron hasta el muelle: las chicas de Orio y Donostiarra –las más madrugadoras–, y los chicos de Cabo da Cruz, Urdaibai, Donostiarra y Getaria, la última trainera en echarse al agua en una sesión que, como la del resto, fue más corta de lo habitual para evitar que los remeros se enfriasen más de lo conveniente.

Las dos regatas que se van a disputar este domingo vienen marcadas por el sorteo de tandas que mandó a los vigentes campeones, Orio en categoría femenina y Urdaibai en la masculina, a dos tandas en las que no tendrán a su lado a ninguno de sus principales adversarios.

Más preocupante parece el escenario de Orio, que además de remar junto a Zumaia, Kaiku e Hibaika lo hará en la primera tanda, por lo que no contará con referencias de ningún tipo. «Cuando salió el sorteo de tandas sí que me preocupó porque ninguno de los rivales llamados a pelear por la bandera estaba con nosotros y eso afecta. Lo sabemos porque en la primera regata de Galicia nos pasó lo mismo. Pero con el paso de los días te vas adaptando y te lo tomas de otra manera», explica Patxi Francés, que lógicamente ha tenido que cambiar el planteamiento para la cita de este domingo. «Sí, preparas la regata de otra manera. Sales con otros conceptos, con otra exigencia porque, sin desmerecer a los rivales, igual te encuentras que vas solo en Puntas y, quieras que no, la gente puede tender a relajarse cuando todavía queda mucho por delante y hay que seguir apretando».

Urdaibai está en una situación similar, pero al menos la Bou Bizkaia remará en la segunda tanda, por lo que tendrá las referencias de sus rivales. Pese a todo, Iker Zabala confía ciegamente en los suyos y prefiere no perder el tiempo en asuntos que no puede controlar. «No me preocupa en absoluto», señala cuando se le cuestiona sobre el sorteo de tandas. «Todo lo que está en nuestras manos lo vamos a intentar hacer. Que el rival esté en otra tanda, que rememos en la segunda e incluso que nos toque la peor calle no está en nuestras manos, y gastar energía pensando en eso no nos beneficia en nada. Lo que tenemos que hacer es pensar en positivo, intentar hacer lo mejor posible todo lo que esté en nuestras manos y, como se ha visto en numerosas ocasiones, cuando Urdaibai da su nivel está un peldaño por encima del resto. No obstante, somos deportistas, tenemos los pies en el suelo y sabemos que en cualquier momento, como ha ocurrido este año, nos puede ganar cualquiera».

Por todo ello,el preparador de los txo afronta la regata como lo hizo el pasado verano. «El panorama más o menos es parecido. Venimos como líderes de Liga y nos hemos clasificado con menos apuros que el año pasado», explica. «Nos presentamos en la Bandera de La Concha en la segunda tanda cuando los otros favoritos van a ir en la primera y nos tocará hacer nuestra regata».

Ese panorama sí que es diferente para Orio que, a diferencia de hace un año, no llega a la bahía donostiarra como campeón de Liga. Pese a todo, Francés apunta a que «el equipo físicamente y mentalmente está bien» y avisa de que «quizás estenemos un puntito por encima de lo que hemos estado durante la temporada. Creo que el bote es más rápido que hace 15 días». En su opinión, «eso se debe a que hemos entrenado adecuadamente y a que la gente está con más moral, con más hambre y con más ganas». De ahí que, pese a las dificultades que va a tener al no poder remar con referencias, el preparador oriotarra es firme y asegura que hoy «aunque tengamos la tanda que tenemos, sólo me conformo con ganar».

Todos temen a que un cambio de viento entre las tandas pueda incidir en el resultado final. En ese sentido las previsiones anuncian un viento del nordeste de unos 10 km/h con ráfagas que pueden alcanzar los 20 km/h, por lo que podría haber diferencias. La altura de ola estará entre el metro y el metro y medio en periodos de 10 segundos, con la bajamar prevista para las 13.39 horas.