La Real Sociedad cuenta con refuerzos de lujo para el 'rush' final

El parón sufrido por el coronavirus en estos dos meses ha provocado que estos dos jugadores se incorporen ahora a los entrenamientos al mismo ritmo que los demás. Illarramendi está plenamente restablecido de la grave lesión que sufrió en su tobillo izquierdo, lo mismo que Zurutuza de sus problemas en el tendón de Aquiles.

Esto significa que Imanol tiene a los 22 miembros de la primera plantilla en condiciones, más Andoni Zubiaurre, el portero que guarda las espaldas a Remiro y Moyá. Por si acaso, también se entrenan con los mayores los jugadores del filial Pacheco, Zubimendi, Roberto López y Lobete. Mimbres suficientes para afrontar con garantías las once jornadas pendientes.

A falta de confirmación oficial, la intención de Tebas es que la Liga se reanude el viernes 12 de junio y concluya el domingo 26 de julio. En esos 47 días se repartirán los once partidos, a una media de uno cada cuatro días.

Esa acumulación de esfuerzos se dará en una situación inédita, por lo que significa desde el apartado físico arrancar de cero una competición después de tres meses sin encuentros oficiales. Son varios los preparadores que advierten de que esta ubicación puede provocar lesiones en los futbolistas de carácter muscular, por lo que los entrenadores tendrán que demostrar mano izquierda para sacar el máximo provecho a la plantilla. Y ahí Imanol tiene una doble ventaja, porque ya lo ha hecho con éxito en los dos primeros meses de 2020 y porque todos sus efectivos están sanos.

Los equipos con fondo de armario podrán afrontar con más garantías un calendario exigente, como lo hizo la Real entre el 12 de enero y el 10 de marzo, cuando disputó catorce partidos de forma consecutiva, entre ellos seis de Copa, saldados todos con victoria. Y en la Liga no solo no acusó el esfuerzo, sino que llevado por una dinámica positiva tuvo la capacidad de escalar hasta la cuarta plaza que ahora ocupa. A ello contribuyeron hombres como Isak, Januzaj, Aritz, Barrenetxea, Aihen o Gorosabel, futbolistas que no habían jugado mucho hasta diciembre pero que con el nuevo año resultaron claves en el rendimiento colectivo. Ahora puede ocurrir otro tanto de lo mismo con jugadores con enorme potencial para desempeñar un papel esencial en el tramo final del campeonato.

Entre ellos destacan cuatro nombres propios: Illarramendi, Januzaj, Llorente y Zurutuza. Refuerzos de lujo que muchos clubes quisieran para sí y que, por distintas razones, no han podido brillar en esta temporada.

Illarramendi, internacional absoluto y con cerca de 300 partidos en la élite entre Liga, Copa y competiciones europeas, es una referencia en el centro del campo. En sus quince meses de ausencia, sumando la rotura del aductor de la pasada campaña y la lesión del tobillo de éste, Zubeldia ha crecido hasta ser uno de los jugadores más importantes del grupo, pero a sus 30 años el mutrikuarra aún tiene cuerda para rato. Es el capitán y un especialista en organizar el juego desde atrás en zonas de iniciación. Su recuperación refuerza ese triángulo centrales-pivote en el que Zubeldia ha tenido que doblar posición para actuar a veces atrás.

Llorente tampoco ha vivido su temporada soñada. Jugar a pierna cambiada le ha limitado en muchas ocasiones y una inoportuna lesión muscular a finales de enero le sacó del equipo en el momento más atractivo del curso. Le dio tiempo para reaparecer en el Camp Nou y demostrar que a sus 26 años sigue siendo una opción fiable de futuro para Luis Enrique en la selección. Aritz y Le Normand se han complementado muy bien durante su ausencia y ahora tendrá en ellos una dura competencia de la que saldrá beneficiado el equipo con tantos partidos.

Januzaj solo ha sido titular nueve veces en 27 jornadas, muy pocas para un futbolista que ha pasado por clubes como el Manchester United y el Borussia Dortmund y que en el último Mundial marcó con Bélgica el golazo por la escuadra que decidió el partido ante Inglaterra en la fase de grupos. A sus 25 años pareció despertar en los primeros meses de este 2020 con dos buenos goles al Valencia y al Valladolid, pero aún se espera lo mejor de él.

Por último, Zurutuza, con más de 300 partidos en la Real, podrá respaldar en la medular a un Merino que lo ha jugado todo y está a un nivel increíble. Un escudero de lujo para el realista más destacado de la temporada.