Si miras arriba hace falta más
Libre directo ·
La Real se diluye tras un gol regalado y una buena primera media hora, para perder y perderse en un juego inofensivo |La Real perdió en el Bernabéu en un partido que se le puso de cara, pero que perdió justamente. Esta vez no hay que mirar ... hacia otro lado ni hablar del árbitro. Ramos hizo mucho para que los de Imanol se hicieran ilusiones, pero lo cierto es que el equipo azul -unos con publicidad y otros sin ella, no se sabe la razón- fue de más a menos para terminar con una derrota triste, en un día en el que en absoluto dio la talla. Ayer era el día apropiado para que un equipo que se cree capaz diera un paso adelante. Un gol regalado en el minuto dos debió ser suficiente para que los de Imanol se vinieran arriba. Pero la alegría solo duró treinta minutos. La Real se fue diluyendo poco a poco para terminar a merced de un Madrid muy inferior al que se le supone.
Como tantas veces, la Real pagó caro sus errores. El primer gol no debió llegar nunca. Un balón pegado en la banda, en una acción en la que no había ningún peligro, con el rival de espaldas a la portería, la convirtió Merino en jugada de gol por una falta innecesaria. Parece mentira que a estas alturas de la película no hayamos aprendido. Pero es lo que hay. Falta innecesaria, gol en contra y partido completamente distinto desde entonces.
En el segundo tanto local hubo mucho de mala suerte, pero lo triste es que a partir de ahí la Real no existió. Al menos en ataque, en donde Portu y Oyarzabal no tuvieron su día y Odegaard, más adelantado que otras veces, no pudo brillar en la que es su casa. No fue el mejor día de la Real. Cuando más se esperaba del equipo de Imanol, el conjunto no fue capaz de dar la talla a pesar de que con el gol de Willian, tenía todo a su favor.
LO MEJOROdegaard parece recuperado de una lesión peligrosa y puede dar mucho, de nuevo, a la RealLO PEORTriste imagen realista en la última hora de partido; ni valentía, ni juego ofensivo ni profundidad EL DATONi Merino, ni Oyarzabal, ni Merino, ni Portu, ni Willian... la Real fue muy pobre en ataqueLA CLAVE DEL PARTIDOMerino hizo una falta innecesaria, en una jugada sin peligro. Ahí llego el empate...
Dicen que los grandes equipos se consagran en las grandes ocasiones, en los mejores escenarios. Pues la Real ayer dio más sensación de equipo de la zona media que de otra cosa. Ningún realista fue capaz de mostrar sus virtudes y de ahí la clara derrota ante un Madrid que no necesitó hacer casi nada para llevarse con justicia los puntos. Porque ni siquiera podemos hablar de un conjunto valiente, mucho menos que otras veces.
¿Y las bandas, qué?
Está muy bien jugar por dentro, tener gente de calidad para crear incertidumbre al rival, pero la Real tiene un problema y es que no tiene juego por bandas. Una vez más lo de Imanol regalaron los extremos, el juego por las bandas, y se diluyeron en pases por dentro. Ni siquiera aprovecharon su ventaja inicial para profundizar en los espacios que dejaba el Madrid. Y cuando la primera parte moría, llegó el error de bulto de Merino, el empate y... Y la derrota tras el descanso, en la que los blanquiazules no dieron la talla ante un equipo que al menos a mí no me pareció nada del otro mundo.
Una lástima, porque la ocasión era buena, pero no se aprovechó. Y tras sumar un punto de los últimos seis, los de Imanol están obligados a ganar al Eibar el sábado que viene si quieren seguir cerca de los puestos de arriba. Porque de igual manera que dos victorias seguidas te catapultan arriba, un punto de seis te frena en seco. Ayer no fue el día, la Real solo estuvo media hora en su línea. Encajó tres goles y una derrota que, de nuevo, frenan la ilusión.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión