Alavés - Real Sociedad: El camino a Europa pasa por Vitoria

La ocasión es propicia para ello a pesar de que a estas alturas todos los equipos tienen algo en juego. En el caso del conjunto babazorro, nada menos que la permanencia en Primera División, ya que ocupa posición de descenso y está a un punto de la salvación. El cuadro de Coudet vive con la soga al cuello después de una temporada bastante irregular, por lo que la Real tendría que aprovechar la situación para pescar en río revuelto y sumar tres puntos de oro en su pelea por las plazas europeas.

Imanol recupera a tres jugadores para este partido, como es el caso de Zubimendi, que no jugó en la última jornada por sanción, Barrenetxea, que tiene el tobillo bastante mejor, y Óskarsson, que también ha evolucionado favorablemente de sus problemas en el sóleo. Solo el primero tiene garantizada la titularidad, aunque el extremo donostiarra también tendría sus opciones dado que Sergio Gómez jugó el partido completo en La Cerámica hace tres días. En el lado negativo, siguen de baja los dos centrales titulares, Zubeldia y Aguerd, así como Zakharyan y Odriozola.

A pesar de que las sensaciones que dejó el conjunto txuri-urdin en la segunda parte en Villarreal no fueron las mejores, lo cierto es que en el último mes ha experimentado una notable mejoría como visitante que le ha llevado a sumar cinco puntos en las salidas a Vallecas (2-2), Las Palmas (1-3) y La Cerámica (2-2). Parecía que ganar en las Islas no tenía ningún mérito pero los canarios han sumado dos victorias después ante Getafe (1-3) y Atlético (1-0) y ahora se ve desde otra perspectiva aquel triunfo que en un principio hasta se despreció. Esa buena dinámica a domicilio unida a la debilidad albiazul en su feudo, donde es el segundo peor local del campeonato por detrás del Valladolid después de haber ganado solo 4 partidos de 15, inclinan el pronóstico hacia un resultado positivo esta noche para los intereses guipuzcoanos.

Para ello, la Real tendrá que mejorar mucho en el aspecto defensivo, ya que encadena 11 partidos oficiales consecutivos encajando algún tanto cuando hasta hace poco su solvencia sin balón era su punto fuerte. El último día que selló su portería fue el 23 de febrero, hace dos meses, contra el Leganés (3-0) en Anoeta y hoy sería una buena ocasión para volver a hacerlo.

Como suele ocurrir en el fútbol, esa mayor debilidad atrás se ha corregido con una mayor productividad ofensiva, ya que ha conseguido 13 goles en 6 partidos, lo que no está nada mal viendo cómo le habían ido las cosas en el resto del campeonato. La asignatura pendiente ahora es mantener esa racha en ataque, liderada por el incombustible Oyarzabal, y mejorar en defensa para garantizar una continuidad en los resultados en este tramo final de temporada en el que, después de medirse al Alavés, le quedará recibir en casa a Athletic, Celta y Girona, y visitar al Atlético y al Real Madrid.

La historia en los desplazamientos a Vitoria es favorable a la Real que presenta un bagaje de 8 victorias, 4 empates y 6 derrotas en los 18 enfrentamientos en Primera División en terreno alavés. El propio Imanol lo ha vivido en primera persona en las cinco que ha realizado desde que llegó al banquillo, en las que ha ganado dos, empatado otras dos y perdido solo una, en la 19/20 cuando se reanudó a puerta cerrada el tramo final de aquel campeonato y cayó por 2-0. El año pasado ganó por 0-1 con un gol de Pacheco a la salida de un córner, en la 21/22 no se pudo vencer (1-1) por un malísimo arbitraje de Del Cerro Grande el día que se lesionó Barrenetxea y en la 20/21 se registró un empate sin goles.

Eso sí, los dos últimos enfrentamientos directos entre ambos conjuntos han terminado con triunfo gasteiztarra, en agosto en la tercera jornada de Liga en Anoeta (1-2) y en pretemporada en el Torneo de Laguardia a penaltis. Así que confianzas, las mínimas, porque la ocasión es propicia para ganar pero no resultará nada sencillo hacerlo.