Feijóo da un golpe de efecto con el regreso de Sémper para fijar una imagen de centro

La decisión del líder del PP muestra su apuesta firme por lanzar una imagen de partido moderado, de centro, alejado de la permanente bronca que ha caracterizado la política española en los últimos meses. El estado mayor del PP teme que este tensionamiento permanente pueda tener el efecto colateral de reactivar el voto progresista en torno al PSOE.

Sémper se fue hace tres años cansado precisamente de una política cainita. También contribuyó a su decisión la mano larga de Génova que hizo y deshizo en el País Vasco hasta el punto de que Pablo Casado impuso como candidato a lehendakari a Carlos Iturgaiz, provocando la dimisión de Alfonso Alonso como líder de la formación en Euskadi.

Sémper, en aquellos momentos presidente del PP de Gipuzkoa, tiró la toalla y decidió trasladarse con su familia a Madrid -su pareja es la actriz Bárbara Goenaga- para trabajar en la consultora Ernest&Young como director de relaciones internacionales. Además, en su nueva etapa también ha continuado con su faceta literaria.

Por tanto, con una vida personal y familiar encarrilada lejos de los focos, su vuelta al ruedo ha pillado a todos por sorpresa, máxime cuando ha repetido en numerosas ocasiones que su etapa pública era agua pasada. El fichaje se ha mantenido en el máximo secreto, hasta el punto de que se anunció ayer tras la rueda de prensa semanal en la que el PP da a conocer los asuntos tratados en el Comité de Dirección. En esta ocasión Feijóo compareció sin previo aviso junto a Sémper, asegurando que su incorporación refuerza la alternativa «solvente y moderada» frente a Pedro Sánchez. En esta línea de alejarse de los extremos, el presidente del PP afirmó que su intención es gobernar sin necesitar de Vox.

Y es que la apuesta por recuperar el espacio moderado resulta clave si el PP quiere hacerse con el timón de las comunidades en juego y de la Moncloa sin el apoyo de la extrema derecha. Una estrategia con la que Sémper se alinea al 100%. El nuevo portavoz del comité de campaña lo dejó claro en su estreno al frente de este cargo. Sus primeras palabras fueron de agradecimiento a Feijóo. «Es el momento de darlo todo porque se abre una oportunidad para cambiar las cosas. Le agradezco de corazón que me brinde esta oportunidad de ser coherente con lo que toda la vida he pensado del fondo y de las formas que deben aplicarse en la política».

Acto seguido se metió en harina y lamentó la crispación que domina la política. Sémper añadió que esta polarización no tiene reflejo en la sociedad, por lo que garantizó que él no contribuirá a generar «más ruido y más radicalidad». «Feijóo me ha pedido lo contrario, que aporte más moderación y centralidad donde otros solo ofrecen decibelios», recalcó.

Recordó que él pertenece a una generación formada en Euskadi en años «complicados» -en alusión al terrorismo de ETA- y subrayó que no ha olvidado que «el odio siempre trae dolor y miseria». «No hace falta atacar a nadie para defender los principios de cada uno», insistió.

Con el nombramiento de Sémper, Feijóo ha completado el equipo de campaña. Se trata de un estado mayor que incluye a dirigentes que en 2018 apoyaron a la exvicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría en las primarias del PP, cuando se enfrentó en segunda vuelta contra Casado. Así, arroparon entonces a Santamaría el actual coordinador del PP y director de campaña, Elías Bendodo; así como el exministro de Fomento Iñigo de la Serna y la senadora Carmen Fúñez, coordinadores del programa para las autonómicas y municipales. Sémper también era 'sorayista', e incluso llegó a sonar como vicesecratario de Comunicación si la exvicepresidenta hubiera ganado las primarias.

La elección de Sémper recibió los parabienes del presidente del PP, quien lo consideró un «gran acierto y una gran alegría». Carlos Iturgaiz, por su parte, recalcó que es profundo conocedor de la política municipal y autonómica.