La ponencia de autogobierno envía a Eusko Ikaskuntza el documento con las propuestas de todos los partidos sobre el nuevo estatus

La ponencia de autogobierno del Parlamento Vasco ha dado el visto bueno este miércoles al envío a Eusko Ikaskuntza del documento que recoge las coincidencias y discrepancias en las aportaciones de todos los grupos para que esta entidad pueda iniciar un proceso de participación ciudadana de cara al nuevo estatus. Además, los grupos han acordado empezar a a debatir sobre sobre las bases del preámbulo del futuro estatus político de Euskadi a partir del 2 de mayo.

La ponencia de autogobierno ha dado luz verde esta tarde, a falta de alguna aportación puntual de los grupos, al documento elaborado por la coordinadora de este foro, la nacionalista Jone Berriozabal, que recoge las coincidencias y diferencias de los propuestas que los distintos grupos han diseñado sobre las cuestiones que debería recoger el nuevo estatus. En los próximos días, este documento se remitirá a la Sociedad de Estudios Vascos-Eusko Ikaskuntza con el fin de que los ciudadanos hagan aportaciones sobre el contenido de dicho informe.

Este proceso de participación ciudadana coincidirá en el tiempo con los trabajos de la ponencia a partir del 2 de mayo, cuando los grupos empezarán a debatir sobre el texto que debería recogerse en el preámbulo del nuevo estatuto. Así lo han explicado este miércoles, en sendas comparecencias de prensa, la portavoz de EH Bildu, Maddalen Iriarte, y el portavoz del PP en la Cámara, Borja Sémper, los únicos que han comparecido tras la reunión de ponencia.

Una vez que la ponencia concluya la elaboración de las bases del nuevo Estatuto, estas se remitirán a unos expertos, que serían los encargados de redactar un texto articulado. También se abriría en los próximos meses un proceso de participación a toda la ciudadanía a través de la plataforma ADI de la Cámara vasca, en un periodo aún por concretar.

Iriarte ha señalado que el objetivo de EH Bildu es que entre mayo y junio se redacten las bases de todo el articulado del futuro Estatuto para que esté listo antes del verano. Sémper, por su parte, ha explicado que el PP ha sido el único grupo que se ha opuesto en la ponencia a que el documento de síntesis que recoge las coincidencias y disensos de los distintos partidos se envíe ya a Eusko Ikaskuntza para que la ciudadanía realice aportaciones.

En opinión del PP, el proceso participativo de los ciudadanos debería comenzar una vez que esté listo un documento concreto que recoja las bases del nuevo Estatuto, y ha lamentado que este proceso participativo va a costar a las arcas del Parlamento «67.940 euros». Sémper ha añadido que lo lógico sería que la ponencia comenzara ya a elaborar las bases de un texto articulado y no perder el tiempo con un proceso «que ya dura seis años», aunque ha insistidp en que el PP no considera necesaria una reforma estatutaria.