Otxandiano tiende la mano a PNV y PSE para lograr «acuerdos amplios de país» sobre autogobierno

Para lograr este objetivo, Otxandiano ha recordado que «contamos con el Acuerdo de Bases y Principios de 2018 -firmado entre EH Bildu y PNV-, así como con otras muchas propuestas e iniciativas anteriores». Y ha señalado que la izquierda independentista afronta el debate con «toda su predisposición, responsabilidad, generosidad y altura de miras». Otxandiano se ha mostrado como un candidato sólido y dispuesto a llegar a acuerdos, con el objetivo de lograr «un nuevo estatus político», como ha repetido durante los últimos meses.

Otxandiano ha criticado con dureza que, el Estatuto de Gernika, «incumplido en cuatro décadas, ha llegado al siglo XXI desgastado y desgarrado, gravemente devaluado por su contenido a iniciativa del poder legislativo español y de su brazo jurídico, el Tribunal Constitucional». Y ha reiterado, como ya lo hizo el pasado martes cuando dio a conocer el adelanto de su discurso, que «la deformación de nuestras competencias exclusivas ha devaluado hasta la mutilación el contenido del Estatuto, lastrándolo estratégicamente».

El líder de la oposición, ha valorado que «hoy el agotamiento del autogobierno vasco es un hecho incontestable, tanto por las insuficiencias y limitaciones del modelo como consecuencia de la progresiva homogeneización por parte del Estado, como por el giro en la naturaleza de la descentralización, la desvirtuación progresiva de los hechos diferenciales y el mercadeo político al que se ha sometido su cumplimiento».

Asimismo, ha criticado que «no podemos seguir con un Estatuto de Autonomía con casi medio siglo de vida». «El debate en profundidad sobre el modelo territorial vuelve a estar como en los años de la llamada transición en la agenda del Estado y el siguiente Gobierno Vasco tiene que situar la actualización del autogobierno y nuestros derechos nacionales y sociales como parte ineludible y elemento central de su gestión política, de tal forma que se acometa la fase resolutiva de la actualización del autogobierno de los tres territorios históricos», ha explicado. Y ha querido meter presión al Ejecutivo formao por jeltzales y socialistas: «este Parlamento vasco cuenta con una mayoría soberanista sin precedentes en su historia. Si no es ahora, ¿cuándo?».

El candidato de EH Bildu ha vuelto a poner el foco en el dibujo que dejaron las elecciones autonómicas en el Parlamento Vasco. «La mayoría de esta cámara es soberanista y defiende que Euskal Herria es una nación y que debe haber derecho a decidir. Al mismo tiempo, hay otra mayoría que se considera de izquierdas y esos dos grupos no son antagónicos y no pueden confrontar».

El candidato de EH Bildu ha comenzado su intervención lanzando un dardo a PNV y PSE. «Un pleno de investidura no es un trámite parlamentario, es un debate parlamentario sobre un programa de gobierno. Para ello, se tienen que reunir una serie de condiciones, y la primera, obviamente, es que los grupos parlamentarios dispongan de ese documento con suficiente antelación». Y ha señalado que el «diagnóstico de nuestra nación y la dimensión y la complejidad de los retos sociales que afrontamos invitan a un ejercicio político urgente: construir las bases para un proyecto de país compartido y un modelo de gobernanza nuevo».

También ha hecho referencia a los resultados de las elecciones europeas, que «nos dejan un mapa político «nuevo y para preocuparse por el ascenso de la extrema derecha en occidente». Así, ha recordado que la ultraderecha está llegando a los gobiernos de las potencias económicas mundiales y que »los frentes de contención serán necesarios« en próximas elecciones como las que se celebrarán en Francia o Estados Unidos. De esta forma, ha comentado que es «imprescindible políticas que nos haga crecer en cuanto a derechos».

En la lista de propuestas que ha expuesto Otxandiano, ha destacado dos bases principales. En primer lugar, «construir un proyecto de país en el que se manifiesta que la identidad nacional diferenciada que debe ser reconocida y respetada a todos sus efectos». Y, en segundo lugar, ha señalado que «es imperativo superar las políticas neoliberales si realmente queremos garantizar la cohesión social y transitar hacia formas de organización social que quepan dentro de los límites biofísicos del planeta».

Tras ello ha nombrado los puntos de encuentro. «Ganar autosuficiencia energética, alimenticia, energética e industrial; modificar las estructura de bienestar en cuanto a políticas de prestaciones, sanidad o cuidados; renovar la educación; reforzar la identidad comunitaria; un modelo propio de seguridad y reducir la huella de carbono». Para hacer frente a estos seis ejes ha desarrollado 25 medidas.

En su intervención, también ha hecho una breve alusión a la memoria. En este sentido, ha indicado que «para responder a los retos sociales y en lo que respecta a la identidad comunitaria, necesitamos hacer una lectura crítica sobre el pasado cercano, para construir una memoria plural sobre el conflicto político». Otxandiano ha añadido que «no se puede construir el futuro dando la espalda al pasado», y ha mostrado su compromiso «para que los próximos años sean para una convivencia basada en el respeto».