Iridoy ratifica que disputará la Alcaldía de Irun antes de que el PNV cierre los pactos con el PSE

Para lograr su objetivo, Xabier Iridoy necesitaría en la sesión de investidura del día 15 del apoyo de Elkarrekin Podemos y EH Bildu, que con sus cuatro y tres concejales sumados a los siete del PNV conformarían la mayoría absoluta necesaria para impedir la reelección de José Antonio Santano (10 concejales). El PP completa el consistorio irunés con un concejal.

Xabier Iridoy ha considerado este martes que la decisión del Euzkadi Buru Batzar (EBB) del PNV de negociar en exclusiva con el PSE la gobernabilidad de las instituciones vascas «es una posición que marca el partido de manera genérica», que le «parece bien» en aras a la «estabilidad» institucional en Euskadi. Pero entiende que «caben excepciones», ya que «habla de pacto global, preferente... y, por tanto, genérico». Por eso ha considerado en una entrevista a Radio Irun que «ello no obsta para que nosotros presentemos nuestra candidatura», ya que Irun es «un caso especial, en el que venimos de donde venimos».

Y es que Xabier Iridoy y José Antonio Santanoprotagonizan un enfrentamiento personal desde hace año y medio, cuando en enero de 2018 se rompió el acuerdo de gobierno que tenían socialistas y peneuvistas por desavenencias graves en el conflicto urbanístico de Korrokoitz. Las diferentes visiones sobre la gestión técnica de la futura construcción de 300 viviendas provocó el cese de Iridoy como delegado de Urbanismo y un cisma que perdura.

El resto de grupos de la oposición, Elkarrekin Podemos y EH Bildu, también críticos con José Antonio Santano, tantearon la posibilidad de una moción de censura al regidor irundarra, que el PNV desechó. No obstante, los jeltzales no dudaron en presentar a Xabier Iridoy a las recientes elecciones municipales, en lo que se interpretó como toda una declaración de intenciones.

A pesar de haber sido la segunda lista más votada, Xabier Iridoy se siente avalado por las urnas, al haber sido la única candidatura en aumentar el número de representantes, pasando de cinco a siete concejales.

La dirección nacional del PNV «ni avala ni deja de avalar» por ahora la iniciativa de su representante en la localidad fronteriza. Fuentes jeltzales recuerdan que el «alcance final» de los pactos que se puedan alcanzar con el PSE «está por definir». Es decir, aún se desconoce si será un pacto global que obligue a todas las diputaciones y ayuntamientos, si será una suma de acuerdos particulares o si cabrán excepciones. «Primero tenemos que acordar con el PSE y luego hablar con las direcciones territoriales antes de llegar a los casos concretos como el de Irun», explican.

El PSE, entretanto, asiste con preocupación al movimiento de Xabier Iridoy, ya que para los socialistas supondría perder su principal bastión municipal en Gipuzkoa. Fuentes socialistas admiten que «el caso de Irun será puesto sobre la mesa en las negociaciones con el PNV», aunque al mismo recuerdan las dificultades que tendrá el candidato jeltzale para llegar a un acuerdo con Elkarrekin Podemos y EH Bildu.

Por el momento, tal y como avanzó este medio, la coalición abertzale no tiene previsto respaldar la investidura de Xabier Iridoy. EH Bildu, que lucha con el PNV por la hegemonía en Euskadi, entiende que esta jugada solo sirve para «engordar todavía más» la enorme bolsa de poder local del partido de Andoni Ortuzar. Al mismo tiempo, EH Bildu no quiere abrir frentes innecesarios ni cerrar puertas futuras con los socialistas en otras instituciones, como el Congreso en Madrid, en el marco de su nueva apuesta por ser también influyentes en la política estatal.