Covite asegura que el Gobierno Vasco retirará de Herenegun! los testimonios de sus víctimas

Covite ha anunciado en San Sebastián que el Gobierno Vasco retirará de la unidad didáctica Herenegun! los testimonios de Conchi Fernández y Antonio Recio, miembros de la junta directiva del Colectivo de Víctimas del Terrorismo del País Vasco, que se incluyeron en los nuevos vídeos, ya que considera que el planteamiento del programa reformado «sigue sin deslegitimar el terrorismo de ETA». El Colectivo de Víctimas del Terrorismo ha afirmado que una sociedad o un país «digno» deben luchar contra «la barbarie terrorista», pero que, «hoy más que nunca, también contra su legitimación en el plano moral, educativo, cultural, social y político».

La presidenta de Covite, Consuelo Ordóñez, hermana de Gregorio Ordóñez, concejal del PP de Donostia asesinato por ETA hace casi 25 años, ha inaugurado esta mañana la XVIII Jornada anual de la asociación titulada 'Tensiones en el posterrorismo de ETA: cómo afrontar pedagógicamente su legado', que aborda en tres mesas redondas los principales retos relacionados con ese escenario, como son las políticas públicas de memoria. Covite pone especial foco en el programa Herenegun! elaborado por el Gobierno Vasco.

El colectivo ya rechazó la primera propuesta de 'Herenegun', a la que hizo una enmienda a la totalidad, porque, según ha recordado su presidenta, Consuelo Ordóñez, «fallaba de base y la raíz se sustentaba en la teoría del conflicto». Ha explicado que el colectivo dio «una oportunidad al Gobierno Vasco«, pero que tras ver el resultado del nuevo planteamiento de 'Herenegun', lo ha vuelto a rechazar porque «sigue siendo el mismo». «Se han creído que por añadir dos testimonios de víctimas de Covite o algunas más, o recortar alguno o incluir algunos nuevos, cambiaba algo, pero no cambia nada porque sigue estando el mismo planteamiento, sigue legitimando la teoría del conflicto«, ha asegurado en referencia a la secretaría general de Derechos Humanos del Gobierno Vasco que dirige Jonan Fernández.

Ordóñez cree que se «manipula» la historia con unas políticas públicas de memoria y unos programas educativos en los que «las balas que mataron a nuestros familiares se diluyen en un mar de violencias, todas por supuesto ilegítimas, pero que nada tienen que ver con el terrorismo, con la característica diferencial del País Vasco, con la intención de imponer un proyecto político mediante el tiro en la nuca».

A lo largo de sesiones de mañana y tarde, los ponentes convocados por Covite en su jornada anual analizan todas las cuestiones que es necesario afrontar para que «los herederos del legado de ETA» no ganen las batallas pendientes «que le quedan por lidiar a la banda terrorista». Ordóñez ha apuntado que si bien ETA «no ha ganado la batalla militar gracias a nuestras Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, su discurso y su proyecto político están vivos y se alimentan desde las instituciones». A su juicio, se corre un serio riesgo de que «ganen la batalla moral, la social, la política, la judicial e incluso la de la historia con mayúsculas».

En su discurso inaugural ha explicado que los que hasta hace unos años «dirigían las estrategias de terror de ETA, los que decidían a quién había que asesinar para que cayeran sus enemigos políticos, se sientan en las bancadas de nuestras instituciones con cada vez mayor poder e influencia». En su opinión, «apedrean nuestra razón con millonarios planes de paz y convivencia» previstos para una comunidad en la que «no ha habido ninguna guerra, sino terrorismo, donde los demócratas siempre hemos sabido convivir y los que necesitan lecciones de convivencia son quienes las dan».

También se ha referido a los 'ongi etorris' a expresos de ETA para decir que «hoy las calles de Euskadi, aquellas en las que asesinaron a nuestros familiares, son cortadas muchas veces para recibir con música, bengalas, champán y flores a quienes los asesinaron y se sienten orgullosos de haberlo hecho».

No han faltado los mensajes dirigidos a la izquierda abertzale y en especial a Arnaldo Otegi, quien, según la presidenta de Covite, «se ríe y se burla al comprobar que hay partidos políticos no nacionalistas que no consiguen representación en Euskadi». «Nos da lecciones de ética mientras recoge los frutos resultantes de haber borrado del mapa electoral del País Vasco a cientos de personas con un tiro en la nuca y de haber perseguido, amenazado y forzado al destierro a miles». Lamenta que el coordinador general de EH Bildu se convierta en todo «un referente social y político sin haber condenado el terrorismo, sin haber dejado de diseñar las estrategias de ETA, sin haberse desmarcado nunca de sus directrices y sin haber abjurado de su trayectoria como miembro de la organización terrorista». Ha mostrado su preocupación por que EH Bildu cuente con un grupo propio en el Congreso de los Diputados ya que, a su juicio, la coalición soberanista «trabaja incansablemente para conseguir la impunidad de ETA».

Ordóñez también ha criticado el proyecto de nuevo estatuto para Euskadi que, a su juicio, «no es otra cosa que convertir en ley el proyecto político de ETA». Además, ha mostrado su preocupación por que «el futuro de la sociedad vasca lo marque el nacionalismo desde esa credibilidad que le dan las instituciones». «Ese poder es uno de los mayores obstáculos para la deslegitimación de ETA. Estamos viviendo una operación de blanqueamiento avalada desde todos los niveles institucionales», ha añadido.