EH Bildu carga contra la Ertzaintza y dice que «se está alejando de los principios democráticos»

Esta lectura choca frontalmente con los mensajes de rechazo del Gobierno Vasco, que desde el principio ha criticado la falta de apoyo que la coalición soberanista ha ofrecido a la Ertzaintza en casos como el de Azpeitia, donde este pasado sábado 40 personas asaltaron la comisaría de la Policía local del municipio de Urola Erdia, «robaron esposas y agredieron a los policías» –hay dos ertzainas heridos–, según reveló días después el consejero de Seguridad, Bingen Zupiria. Unas declaraciones que se suman a las pronunciadas por el lehendakari, que aseguró que «los violentos nos tendrán siempre enfrente».

Los llamamientos de los partidos políticos para que se sumen a la condena no están haciendo mella en la formación liderada por Arnaldo Otegi, que este jueves elevó el tono en un comunicado y cuestionó el proceder de la Ertzaintza en tres cuestiones clave: la proporcionalidad, la contención y la prevención de daños mayores. El mensaje de Bildu no se quedó ahí. También calificó de «inaceptables y desproporcionadas» las actuaciones policiales de los últimos días, en alusión a las que se han sucedido en Azpeitia y en Vitoria en un plazo de apenas cuatro días y que se suman a las que tuvieron lugar a comienzos de verano en Beasain y en Hernani.

El modelo policial es una cuestión que históricamente ha enfrentado a la formación soberanista y el resto de partidos políticos. Desde EH Bildu, siempre con un tono más beligerante respecto a la actuación de los cuerpos policiales, cuya legitimidad ha puesto en cuestión en más de una ocasión, se considera que hace una falta una reforma «en profundidad» del sistema. En el comunicado divulgado ayer, también realiza un llamamiento «a todos los agentes políticos y sociales, y a la sociedad en general», para que las fiestas del resto del verano en Euskadi se desarollen en un clima de «respeto y libertad». Y es que el cóctel de alcohol y jóvenes en un contexto de fiestas patronales es en ocasiones un caldo de cultivo para que se reproduzcan episodios de este tipo.

En lo que respecta a los sucesos del sábado en Azpeitia, en contraste con la versión ofrecida por el Gobierno Vasco, EH Bildu relata que la Ertzaintza irrumpió de madrugada en un recinto festivo «abarrotado, por una pintada realizada con bolígrafo, provocando graves altercados», mientras que en el caso de la capital alavesa «cargó con violencia contra una acampada no comunicada pero pacífica en la Plaza de la Virgen Blanca, con personas de todas las edades presentes». Un episodio que derivó en cuatro detenidos y siete policías heridos en la noche del miércoles. Desde el punto de vista de la coliación abertzale, ambas intervenciones son del todo «desproporcionadas y, por tanto, inaceptables».

Incidiendo en ello, la formación soberanista enumera una serie de casos de los últimos meses en las calles de Euskadi que, a su juicio, constituyen un ejemplo de que la actuación policial atesora un problema «estructural». Cita por ejemplo «hechos como la amputación de un testículo a un joven por una actuación policial desproporcionada este pasado abril» en el desalojo de un gaztetxe de Bilbao, «la agresión a una aficionada de la Real Sociedad en Anoeta en marzo del año pasado, las graves lesiones provocadas en un ojo a un joven en Tolosa un mes antes, o las amenazas vertidas en su día contra el Gobierno por parte del autodenominado movimiento asindical 'Ertzainas en lucha'».

Por ello, EH Bildu aseguró que «este no es el modelo policial por el que la sociedad vasca apostó tras el franquismo». «La ciudadanía demandó una policía democrática, civil y al servicio de la comunidad, y no una que reproduzca lógicas autoritarias del pasado», indicó.

Un mensaje en el que ahonda la formación independentista al exigir una «reflexión y una reforma en profundidad del modelo policial». «La sociedad vasca merece una Policía que respete los derechos, actúe con responsabilidad y resuelva los problemas y los conflictos sin agravarlos», apuntó. En definitiva, reclama «una Policía que recupere los principios y valores democráticos sobre los que Telesforo Monzón erigió la Ertzaintza y que abrazó una amplia mayoría de la sociedad vasca: una policía civil, democrática y euskaldun, al servicio de la ciudadanía vasca».