«Eider Mendoza va a ser la primera diputada general de Gipuzkoa»

–¿Tocaba ya poner a mujeres al frente de las principales candidaturas del PNV?

–Hace cuatro años se nos criticó por presentar una fotografía en blanco y negro desde el punto de vista del género. Teníamos ese reto como organización y hemos logrado un equilibrio de género.

–¿Hasta qué punto han dado este paso por la presión social? Incluso el PSE ha dicho que lo hacen por pura imagen.

–Es igual de injusto decir eso que decir que el PSE ha retrocedido en términos de igualdad porque ha sustituido a una secretaria general por un secretario general. Nosotros hemos hecho la autocrítica interna. Y lo más relevante era que esto no se convirtiera en 'tengo que poner una chica y me da igual quién', como han hecho otros partidos. Las mujeres que vamos a incorporar a las listas son de una solvencia absoluta y de una amplia valía.

–Por cierto, ¿qué impresión se llevó de Feijóo tras su cita?

–En lo personal, bien. Me dio la sensación de que es una persona abierta y que da mucha relevancia a la gestión. Y desde ese punto de vista podemos entendernos. Ahora, en la agenda política estamos muy lejos.

–¿No hay posibilidad de entendimiento con el PP de Feijóo?

–Tiene que aclarar mucho. Ahora lo puedo decir porque ha pasado tiempo. El día que yo estuve con él, se daba por cierto el acuerdo sobre el CGPJ.

–¿Feijóo ofreció al PNV uno de sus diez vocales?

–No. Él no tenía que ofrecer, pero estaba hecho el acuerdo.

–Insisto, ¿con un vocal del PNV?

–Estaba hecho el acuerdo. Y 24 horas después se fue al carajo. Entonces, ¿cuál es el PP verdadero? ¿El que cerró el acuerdo o el que luego puso las patas sobre la mesa? Al PP le falta hacer su travesía del desierto y clarificar qué partido es.