Ibone Bengoetxea | Vicelehendakari y consejera de Cultura y Política Lingüística

«El acuerdo PNV-PSE es meridianamente claro con el nuevo pacto estatutario y lo vamos a cumplir»

–Joseba Egibar confirmó finalmente este viernes que deja el liderazgo del PNV de Gipuzkoa tras 33 años de andadura. ¿Qué supone esta decisión?

–El PNV está en un momento de renovación de sus cargos y a quienes les toca hablar ahora es a los afiliados. Yo me pronunciaré a este respecto en mi batzoki como afiliada de base que soy.

–¿Pero significa que se allana el camino para una renovación integral incluido Andoni Ortuzar?

–El PNV cumplirá 130 años de historia en 2025 y a lo largo de todo ese tiempo ha sabido adaptarse a lo que la sociedad, a la que tiene que servir y plantear propuestas, le estaba demandando en cada momento. Estoy segura de que en esta ocasión también lo va a hacer.

–Es la mano derecha del lehendakari Pradales. ¿Desde esa cercanía cómo le ve en estos primeros compases del mandato?

–Le estoy viendo con mucha exigencia hacia sí mismo y hacia las y los consejeros. Creo que esto va a caracterizar su mandato, va a ser un líder exigente porque la sociedad vasca necesita respuestas. Le estoy viendo también como un líder cercano que es capaz de escuchar alternativas distintas a las que pueda tener e integrarlas. Y esto mismo nos ha pedido además a los consejeros desde el primer momento. Es un líder valiente que no se muerde la lengua, que es capaz de mandar mensajes claros.

–¿Están ya empastados los miembros del Gobierno Vasco o aún es pronto para afirmarlo?

–Yo diría que sí. Muchos de nosotros ya nos conocíamos.

–¿Se arregla bien con el vicelehendakari socialista Torres?

–Me arreglo estupendamente. A Mikel lo conozco de cuando era alcalde de Portugalete y yo teniente de alcalde del Ayuntamiento de Bilbao y me tocó presidir Eudel. Compartimos ejecutiva y me arreglé francamente bien con él. Después, en la Diputación Foral de Bizkaia, yo era la diputada de Relaciones Institucionales y él, miembro del Consejo Territorial de Finanzas. Cuando supe que iba a ser vicelehendakari y lo mío también era un hecho, fue de las primeras personas a las que escribí. Me gustó mucho saber que el otro vicelehendakari iba a ser él.

–Entre los principales objetivos del departamento propone incrementar el uso social del euskera. ¿No es paradójico cuando el número de vascoparlantes es mayor que nunca?

–Me gustaría que el euskera fuera un elemento de conexión y un elemento de emocionalidad positiva porque las lenguas sirven sobre todo para conectar personas. Lo que pasa es que, a pesar de que el conocimiento se ha incrementado en los últimos años, hay algunos espacios en los que no se utiliza y, por lo tanto, no sirve para generar esas conexiones o para aumentar las conexiones que tienen las personas. Me refiero a incrementar el uso del euskera en el mundo de la empresa privada para que no haya ese desfase, en la plaza pública para que no esté solamente vinculado como una herramienta de éxito o de fracaso en lo académico, sino que vaya más allá, o que a las personas que vienen a nuestra tierra a desarrollar un proyecto de vida, les pueda facilitar que tengan más y mejores conexiones.

–¿Le preocupa el goteo de sentencias que anulan exigencias con el euskera en determinados ayuntamientos?

–Relativamente. Creo recordar que son 11 o 12 sentencias firmes en relación a estas exigencias que vienen en un momento además muy concreto en el que ha habido procesos de estabilización masivos en todas las administraciones públicas. Probablemente no comparta todas las sentencias, pero siempre voy a ser muy respetuosa con las resoluciones judiciales. Eso sí, voy a defender aquello en lo que creo.

–¿Es una ofensiva judicial contra la euskera como han criticado algunos partidos?

–No quiero hablar del euskera en blancos y negros. El euskera ha de sacarse de todos los conflictos, y creo que la ciudadanía tiene derecho a poder elegir en qué lengua quiere comunicarse con la administración pública. Y eso quiere decir que la administración pública tiene la obligación de garantizar ese derecho.

–El tema estrella de este arranque de curso ha sido la iniciativa para incluir el derecho a decidir en el nuevo Estatuto. ¿A la vista de las mociones aprobadas por PNV y EH Bildu en las Juntas Generales se puede afirmar que se está levantando un nuevo bloque soberanista?

–Como gobierno tenemos un acuerdo firmado y estoy segura de que lo vamos a cumplir. Otra cosa distinta son las decisiones que cada uno de los parlamentos territoriales o los plenos municipales adopten en el ejercicio de la mayoría de la democracia.

–¿Usted cree que debería estar recogido en el futuro texto?

–Yo, como vicelehendakari, me voy a comprometer en cumplir lo que hemos aprobado como programa de gobierno y es muy claro a ese respecto. Habla del cumplimiento íntegro del Estatuto de Gernika, que ya es hora, todavía nos quedan 29 transferencias pendientes, y creo que ahí nos vamos a empeñar hasta conseguirlo. Habla también de ensanchar el autogobierno y en concreto hay un artículo denominado 'nuevo pacto estatutario', que es meridianamente claro, y por tanto, como miembros de ese gobierno lo vamos a cumplir.

–Usted ha dicho que Euskadi «es un sujeto político con todos los derechos», ¿incluye ahí el de autodeterminación, es partidaria de reclamar la independencia de Euskadi?

–Soy una afiliada al PNV y comparto su ideario y esto no es incompatible con ser vicelehendakari de un gobierno que está sustentado por dos partidos distintos.

–¿Qué opina de la afirmación del vicelehendakari Torres de que «si se quiere utilizar la actualización del autogobierno para profundizar en el tema de la independencia, la soberanía o en el derecho a crear un nuevo estado, habrá una fractura importante»?

–A mí no me parece que deba sustituir a lo que hagan los partidos, me corresponde cumplir un programa de gobierno que tenemos pactado. No sé si habrá una fractura o no, no debo aventurarme a hacer futuribles en un tema que es delicado. En nuestro día a día nosotros estamos a ejercitar las competencias que tenemos para dar respuesta a las políticas públicas que debemos sacar adelante.

–La consejera Maria Ubarretxena anunció hace unas semanas que el Gobierno Vasco había activado internamente los informes y documentación para la transferencia de la gestión del régimen económico de la Seguridad Social. ¿Cómo están de avanzados los trámites?

–Hay que darle tiempo al tiempo. Una cosa es que el departamento haya hecho los informes internos, pero tienen que contrastarse con el Gobierno español. Tendrán que modular, contrastar y llegar a acuerdos y estoy segura de que cuando lo hagan nos traerán una propuesta que será refrendada. Pero no puedo adelantar nada más.

–¿Se ha enviado ya la documentación al Gobierno español?

–No tengo el detalle. Creo que le toca a la consejera Ubarretxena trabajarlo con el Gobierno español, llegar a un acuerdo y después dar cuenta de él.

–El PSE ha avisado de que si se transfiere Puertos se perderá el carácter de «interés general». ¿Supondría, como apuntó Eneko Andueza, «un quebranto importante para la economía guipuzcoana en el caso de Pasaia»?

–Estoy segura de que en este asunto no vamos a tomar ninguna decisión que sea mala para Euskadi.

–El lehendakari ha rechazado la propuesta presupuestaria de EH Bildu, ¿significa que el entendimiento con la coalición que lidera la oposición en el Parlamento Vasco no va a ser una tarea fácil?

–Somos un gobierno abierto, capaz de atender propuestas constructivas y medidas, pero no somos un gobierno irresponsable. Hemos tenido que hacer una previsión de cierre con 700 millones de euros menos por el impacto de los mutualistas, decir con cierta alegría que hay que poner 1.500 millones más... Estamos abiertísimos a propuestas constructivas realistas y a la expectativa de si algunas de las propuestas que tenemos encima de la mesa son tácticas o son ciertamente propuestas constructivas realistas concretas. Pero 1.500 millones de repente... Debemos ser responsables y dotar presupuestariamente a aquellas políticas en las que creemos sin generar expectativas en la ciudadanía de que todo es posible.

–¿Qué puede adelantar sobre la apuesta del proyecto 'Anoeta Berri' anunciada por el lehendakari durante la campaña electoral? ¿Cómo está la disposición del Gobierno y la financiación?

–Entendemos que toda esa zona debe ser renovada y también nos han puesto encima de la mesa la necesidad de transformar Illunbe. Ahora le corresponde al Ayuntamiento irnos trasladando el alcance de los proyectos y una vez que recibamos cada uno de ellos, los estudiaremos y los dotaremos económicamente para sacarlos adelante en colaboración interinstitucional.

–El director del Zinemaldia ha dicho que el año que viene hay que designar a la persona que le sustituirá a partir de 2026. ¿Tiene usted algo pensado? ¿Aceptará la propuesta de Rebordinos que se inclina por que sea una mujer?

–Todavía ni siquiera he ido a una primera reunión del Patronato en el que están el Ayuntamiento, la Diputación, el Gobierno Vasco y el español. Por tanto creo que es en este foro en el que tendremos que abordar este asunto.

–En la conferencia sectorial de Cultura del pasado viernes en la que se reunieron con el ministro Ernest Urtasun se aprovechó para hablar del Estatuto del Artista. ¿Confía en que vaya a ser realidad en breve?

–En Euskadi, hemos elaborado un documento que en breve lo pondremos a disposición de los artistas que recoge todas aquellas cuestiones que en el devenir de su vida profesional tienen que considerar porque es un sector frágil con muchos subsectores, que no son iguales y creemos que es bueno que tengan información. Desde los derechos de propiedad intelectual a cómo se hace un contrato, qué tienen que tener en cuenta cuando les contrata un promotor o un ayuntamiento. Se trata de información que creemos que puede ayudarles a que tengan cierta tranquilidad en lo que se refiere a su profesión.