Atutxa destaca que se ha salvado la «dignidad» de un Parlamento Vasco al que se quería «arrodillar»

Un emocionado Juan María Atutxa, con voz entrecortada, ha comparecido en la sede del PNV en Sabin Etxea para congratularse por la sentencia del Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo que ha condenado a España por inhabilitarle en su día como presidente del Parlamento Vasco por negarse a disolver el grupo parlamentaria de la entonces ilegalizada Batasuna. Atutxa ha aplaudido que «la verdad se ha impuesto» y que «la dignidad no se ha dejado pisotear». Ha destacado que con su sentencia hace 14 años, el Tribunal Supremo quiso «arrodillar» a la Cámara autonómica, «nacida de la voluntad del pueblo».

Arropado por líderes del PNV, con Andoni Ortuzar a la cabeza, Atutxa ha tenido un recuerdo a sus compañeros de Mesa del Parlamento condenados, Gorka Knörr (EA) y Kontxi Bilbao (EB-IU), con los que ha hablado esta mañana. Atutxa ha asegurado que «volvería a hacer lo mismo ahora» pese al «calvario de estos catorce años». Como anécdota, ha señalado que en aquel entonces se encontró en Bilbao con el entonces fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, y le afeó en persona su «inmoralidad».

Atutxa ha asegurado que «si hoy fuese 2003, el que les habla haría lo mismo. Ni en 2003 ni en años sucesivos, quien les habla, ni mis compañeros Gorka Knörr y Kontxi Bilbao hemos sido desobedientes. Hemos sido objeto de una manipulación y un atropello brutal», ha indicado.

A su juicio, la sentencia supone del Tribunal de Estrasburgo es «una enorme satisfacción» y ha señalado que él ya dijo: «No moriré hasta que el TEDH dicte sentencia. Hoy la ha dictado y, a partir de este momento, tampoco tengo prisa y pido prórroga», ha señalado.

Por su parte, el presidente del PNV, Andoni Ortuzar, ha celebrado la noticia, ha «reivindicado» la figura de Atutxa y ha denunciado la «politización de la justicia española».