Cuando el vino es pasión

La cultura del vino ha experimentado tal evolución en la última década que la apuesta de las grandes bodegas de Haro por el maridaje que estrecha los lazos entre vino y turismo permite al visitante disfrutar de una amplia oferta de actividades. La salida al mercado de la nueva añada de tres marcas de referencia (Hinia 2009, Muga Crianza 2010 y Viña Ardanza 2005) nos ofrece la posibilidad de ahondar en la agenda programada por Martínez Lacuesta, Muga y La Rioja Alta. Es la mejor manera de comprobar sobre el terreno que el vino, cuando es bueno, casa con todo.

Muga

Premio Best Of Internacional en la categoría de Experiencias Innovadoras y Prácticas Sostenibles, Muga se hizo acreedor a este reconocimiento mundial gracias a la enorme diversidad de actividades. El circuito arranca con una visita guiada por la bodega, donde se explica el proceso de elaboración y crianza de sus vinos y se ofrece una cata de dos de sus marcas en una copa, que el visitante recibirá como recuerdo en el área de Winebar.

Sumen a esto la posibilidad de realizar, en grupos de hasta 24 personas, un curso de iniciación a la cata en el espacio Torre Muga. O de concertar previamente un viaje en globo para descubrir los viñedos desde el cielo.

Para profesionales y empresas se abre, al mismo tiempo, un amplio abanico de posibilidades de reservar el salón de reuniones. Con capacidad para 40 personas, incluye la visita de los participantes a la bodega y una cata.

Implicada en el impulso de la candidatura del Paisaje Riojano, Paisaje Cultural del Vino, como Patrimonio Mundial de la Unesco, en la agenda de la bodega figura además la visita al viñedo. Dirigida a grupos de no más de 16 personas, implica el traslado en vehículos a sus viñas. Y para recuperar fuerzas, chorizo asado al sarmiento en pleno campo con dos de sus vinos.

La Rioja Alta

Existen experiencias inolvidables. Únicas. Imagínense dormir en la suite de una lujosa casa-palacio dentro de una bodega, desayunar contemplando un mar de viñedos, degustar un maridaje de gastronomía y los mejores vinos en un comedor privado o palpar los secretos que esconde una bodega centenaria. Son algunas de las propuestas que ofrece el Grupo La Rioja Alta. Sus bodegas, ubicadas en cuatro de las zonas vitivinícolas más prestigiosas del país (Rioja, Rioja Alavesa, Ribera del Duero y Rías Baixas) permiten la magia de vivir el vino.

La Rioja Alta ha estrenado un nuevo programa de visitas Premium (se puede consultar las fechas y horarios en la web) con las que se disfruta de un recorrido por la bodega, una cata comentada de dos reservas (Viña Arana y Viña Ardanza) y un gran reserva (Gran Reserva 904), un aperitivo y un obsequio.

A apenas dos kilómetros de Laguardia (Álava) se emplaza Torre de Oña. Un precioso château que garantiza una visita y una estancia de ensueño en sus cinco suites dobles de uso exclusivo y para un único grupo. Pueden consultar horarios y reservar cita en el apartado de enoturismo de www.torredeona.com.

Martínez Lacuesta

¿Quedamos al vermut? !Que te la den con queso! He ahí dos de las frases que más llegarán a escuchar durante su estancia en Haro. Y, al mismo tiempo, los nombres con el que se presentan en sociedad dos de las actividades enoturísticas que mejor definen la decidida implicación de Bodegas Martínez Lacuesta en un proyecto que ha acabado convirtiéndose en santo y seña de su nueva etapa, iniciada hace apenas unos años tras la inauguración del complejo en el paraje de Ubieta.

La experiencia arranca a las 11.00 horas con la visita a la bodega, una hora después en el comedor privado donde se formula a los visitantes una sugerencia irrenunciable: una degustación que descubre la perfecta conjunción que se da entre el queso y el vino.

De la mano de Alejandro, un experto en productos lácteos y perteneciente a la firma Eterraván, se sirven cuatro quesos elaborados en España y otros países europeos como Inglaterra, Suiza, Francia o Italia, y con ellos tres vinos de la casa.