«La pasión está por encima de la razón»

Inma Cuesta protagoniza 'La novia', una libre adaptación de 'Bodas de sangre' de García Lorca a cargo de la debutante Paula Ortiz, que presenta un aspecto visual llamativo y personal, además de un reparto de altura. La película ha recibido nueve nominaciones a los premios Feroz, que concede la Asociación de Informadores Cinematográficos.

Aunque te acompañan actores muy conocidos la película se basa mucho en tu personaje. ¿Fue un papel muy exigente?

Lo que me impresionó del proyecto fue precisamente que La Novia de 'Bodas de sangre' era un personaje mítico, así que era un gran reto, una gran responsabilidad y al mismo tiempo un privilegio interpretarlo. Así lo afronté, con todo el vértigo y todas las ganas. Ha sido un personaje muy complejo porque transita por muchas emociones y requiere una mirada que a veces dice más que las palabras. Y lo he hecho a corazón abierto, con todo lo que tenía para darle.

¿Trabajasteis mucho para que los diálogos de Lorca sonaran naturales?

Ahí estaba la gran dificultad. Paula nos insistió muchísimo en el privilegio que era la palabra de Lorca, sus versos, y eso lo trabajamos muchísimo, para que sonaran con mucha verdad y que no alejaran al espectador sino que, por el contrario, le hicieran entrar en el viaje. Hubo mucho trabajo de texto, mucha lectura para tratar de ver qué significaba todo lo que estábamos diciendo de manera que sonara muy creíble y se entendiera bien por parte del espectador.

La película tiene una estética muy cuidada. Supongo que las secuencias cambiaron mucho en post-producción, ¿te sorprendió el resultado?

Sí, siempre, porque tú estás metida en la faena, de lo que te toca hacer... pero luego todo crece porque hay un trabajo maravilloso del director de fotografía, la música, los planos... Al final todo se convierte en un baile perfecto entre lo que hacemos los actores y el montaje posterior y el resultado es una oda a la belleza, algo muy poético y muy visual. Cada plano podría ser un cuadro.

El cierzo ayuda

En el filme el entorno se ve muy hostil. ¿El rodaje fue cómodo?

Sí, lo fue. Rodamos la mayor parte de la película en Los Monegros y la mayoría sucede en exteriores, lo cual siempre resulta más difícil por el tiempo, en este caso por el cierzo, que resultaba absolutamente descontrolado. Pero curiosamente todo eso fue a favor de la obra y ese viento que azotaba la ropa y que movía todo da un aire casi perturbador a la película.

Tu personaje se deja arrastrar, casi a su pesar, por su amor por Leonardo (Alex García) a pesar de que ya tiene una relación con El Novio (Asier Etxeandia). ¿Te resulta una situación que se suele dar en la realidad?

La obra narra la encrucijada de una mujer que siente que dos amores la arrastran con la misma fuerza pero están en planos diferentes. A El Novio se le ha retratado a menudo como un personaje más débil pero en este caso Paula quería que tanto él como Leonardo arrastraran a La Novia de la misma manera poderosa. Entiendo bien a mi personaje porque hay algo que está por encima de la razón, que es la pasión y el destino.

Dos amores

Es posible enamorarse de dos personas a la vez, algo que no suelen reflejar muchas películas románticas.

Es absolutamente real. Los clásicos siempre nos traen cuestiones universales y la realidad siempre supera a la ficción. Al fin y al cabo esta historia está basada en una nota de un periódico que García Lorca leyó y aunque luego le añadió cosas en el fondo se trata de una historia real.

La película conserva parte del machismo, las familias que juzgan, sobre todo, a la mujer... ¿crees que esto aún está presente en la sociedad?

Es una historia atemporal. Dependiendo de dónde pongamos la mirada nos podemos encontrar con casos muy parecidos. El otro día vi una película turca que habla de cinco hermanas que por un malentendido son juzgadas y encerradas en su casa, de manera que ese hogar se convierte en una cárcel para ellas y eso viene a ser 'La casa de Bernarda Alba'. Lorca retrata algo de la época pero esta película no se sabe muy bien en qué período está ubicada ni dónde y no me parece que sea algo que esté fuera de nuestro tiempo.