Anna Magnani era arrogante. Y no por la vez que vertió una fuente de espaguetis sobre la cabeza de Rossellini. Era una mujer a la ... que no se tosía. No soportaba las tonterías del Método (cuando rodó con Brando 'Piel de serpiente' se calló pero todo le pareció una memez: «Siento que he estado en un congreso de psicoanalistas», escribió a su hijo). De la actriz italiana acaba de estrenarse un documental en Cannes. Nada nuevo. Juliette Binoche estrena 'Clara y Claire'. En una entrevista dice que con la edad pierde menos tiempo tratando de complacer a la gente. Un consejo de 'coach' barato. Me gusta más Kristin Scott-Thomas en 'Fleabag' cuando dice que acepta un premio que le parece una bobada para no parecer una capulla. Para no complacer a la gente hay que vivir sin relacionarse. Y no se pueden hacer películas. O sí, que Binoche no consiente trabajar con François Ozon. Las demás tenemos que evitar ser unas capullas y comernos los espaguetis.
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