Un desfile con aires renovados en el nuevo Garbera

San Sebastián Moda Festival se trasladó en la tarde de este viernes hasta Garbera para celebrar un 'fashion show' en el que trece marcas nacionales e internacionales, pero con sede en Gipuzkoa, mostraron sus propuestas para esta temporada otoño-invierno.

En un evento que en cada edición reúne un numeroso público, porque un viernes por la tarde Garbera suele tener mucha afluencia y, además, la moda siempre es un gran reclamo, el centro comercial plasmó que ese proceso de transformación al que se ha sometido en los últimos años ha llegado, cómo no, también a la moda. En una ubicación hasta ahora inédita para estos desfiles como es el nuevo pasillo central que conecta su zona más antigua con la que ha sido recientemente inaugurada, San Sebastián Moda Festival pudo dar la bienvenida a importantes firmas que hasta ahora no habían tomado parte en este acto, algo que siempre es una grata noticia.

Nuria Vegas, gerente del centro comercial, destacaba que «el nuevo Garbera persigue el objetivo de ampliar y enriquecer la oferta existente para convertir Donostia y Gipuzkoa en lugares referentes para la industria de la moda, y colaborar con iniciativas como San Sebastián Moda Festival nos ayuda a alcanzar este reto y a que nuestros visitantes experimenten la moda en un entorno moderno, integrado y sostenible».

El 'fashion show', que arrancó y finalizó con actuaciones de Bamboo Dance School, puso en valor la diversidad de marcas a las que en Gipuzkoa hoy en día se puede acceder, un valor añadido al territorio y, sin duda, un reclamo para los propios guipuzcoanos y para residentes de otros territorios, regiones y países, que nos visitan atraídos también por la oferta de moda que aquí se concentra.

En el desfile, curiosamente, predominó la moda masculina. Fue Boston, una de esas firmas a las que San Sebastián Moda Festival da la bienvenida, la encargada de abrir la pasarela y lo hizo con unos 'looks' que invitan al hombre a expresar su personalidad natural a través de la moda. Después, llegó Lama The Lab, una firma creada por tres amigas que diseñan y producen en Euskadi y que quieren trasladar al mundo la cultura vasca a través de la moda.

Y de lo local, la pasarela saltó a lo internacional de la mano de Scalpers, uno de los principales operadores de retail de moda españoles, pero con gran reconocimiento internacional y presente en más de diez países. La marca de la calavera es sobradamente conocida.

Fue Fútbol Emotion, esa firma que nació para dar a los porteros y las porteras todo lo que necesitaban, pero que hoy ya no entiende de demarcaciones y ofrece todo tipo de material relacionado con la práctica del deporte rey, la encargada de introducir la moda deportiva en este desfile. Tras ella, llegarían dos gigantes en este ámbito. Y es que le sucedió una marca con presencia mundial como es JD Sports, cuyos modelos tomaron la pasarela. Después, la multinacional estadounidense Nike, presente en Garbera y que no podía faltar a esta cita, se estrenó en este festival donostiarra mostrando sus propuestas para esta temporada otoño-invierno.

Una firma que conoce bien la pasarela de Garbera es Dockers, esa marca que revolucionó la ropa de oficina y que es, entre otros muchos motivos, conocidos por esos pantalones caqui tan emblemáticos. Celio también 'aterrizó' en los desfiles de SSMF y lo hizo para demostrar que los hombres pueden vestir como mejor se sientan, porque en esta firma están orgullosos de ser una marca hecha para la vida cotidiana. Después, Roblaz Design se estrenó también con esas colecciones hechas a mano en las que demuestran que cada persona merece toda la atención y cuidado y que cada detalle tiene su valor.

A Garbera llegó otra de esas grandes marcas que suman en cualquier pasarela, y no es otra que Jack & Jones. Su moda masculina promueve el concepto de club y de comunidad. ¡Bienvenidos al nuestro, que es el San Sebastián Moda Festival! Por cierto, la familia crece también con Munich, una firma de calzado deportivo referente en algunas modalidades, como el fútbol sala, pero que con el tiempo se ha convertido en moda y diseñan también textil y otros complementos.

La joyería tuvo su protagonismo con Aristocrazy, sinónimo de exclusividad, calidad y perfección. Un sello que entendió que las joyas, además de serlo, debían funcionar también como un complemento de moda. Con vocación internacional, está en los circuitos de compras de las principales ciudades.

Fue Scotta 1985 quien cerró el desfile de Garbera y lo hizo con su moda masculina. Apuestan por la 'slow fashion', por lo que los tejidos sostenibles tienen cada vez más peso. Un colorido intenso y un estilo casual son otras dos señas de identidad de una marca que aún no ha cumplido los diez años de vida.

Hay que destacar también que, para redondear la experiencia de este 'fashion show', la firma de cosmética Freshly tuvo un detalle con el público asistente. Tras los desfiles, de cuyo estilismo se encargó la firma Jean Louis David, se celebró un kissing room en Terracity.

San Telmo cogerá este sábado el testigo de Garbera con seis desfiles que serán la traca final de esta edición de San Sebastián Moda Festival.

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