«Los sanitarios están saturados»

Atención Primaria ·

Los profesionales de los centros de salud se concentran hoy a las 13.00 horas en los ambulatorios para denunciar lo que confirman los pacientes: «Necesitan refuerzos»

Iker Marín

San Sebastián

Miércoles, 22 de diciembre 2021, 06:37

Alfonso Martínez | Amara, 52 años

«La situación genera en la ciudadanía estrés y rabia»

La saturación y presión de trabajo que los profesionales sanitarios de Atención Primaria del Servicio Vasco de Salud dicen soportar «se traslada a los pacientes ... y nos genera a los ciudadanos estrés y rabia. Sientes que no te están atendiendo correctamente. Luego siempre se dice que Osakidetza es el mejor sistema público de salud de España y te das cuenta de que deja mucho que desear», señala este vecino de Amara. En su opinión, esta situación se solventaría «con el refuerzo de personal. Se nota que hay menos profesionales sanitarios en el centros de salud, eso yo lo noto». Considera que esta falta de médicos, enfermeras y auxiliares está detrás de, por ejemplo, la cancelación de citas para las consultas médicas.

Publicidad

Cuenta que «a nosotros ya nos han llamado para retrasar un electrocardiograma por la afección que provoca la pandemia en el sistema. Y nos han dado otra cita para dentro de dos meses». Además, cuenta que «si vas a coger cita para el otorrino y es urgente no tienes sitio hasta dentro de tres meses».

Otro aspecto que enerva a este donostiarra es «lo de tener que hablar con una máquina para lograr contactar con el centro de salud. O te armas de paciencia o no hay nada que hacer. A mí me ha pasado esta semana. Es algo asumido, pero duro», considera.

Explica que «cuando oyes hablar a la consejera de Salud del Gobierno Vasco, con sus buenas palabras sobre cómo funciona todo en Osakidetza, piensas que te está contando un chiste. Son palabras bonitas para ellos, pero luego la realidad es otra muy distinta».

Publicidad

Mikel Ansorena | Amara, 67 años

«Los sanitarios están más estresados que de costumbre»

En mi caso la presión que los sanitarios dicen tener y soportar no la he sentido. He tenido que esperar un poquito antes de entrar en la consulta que tenía, pero la doctora se ha disculpado conmigo», comienza diciendo Mikel Ansorena al salir del centro de salud de su barrio. «Sí es cierto», añade Ansorena, «que a los profesionales sanitarios se les ve que trabajan con prisas y de un lado para otro, de manera rápida. Pero de cara al paciente, y hablo de mi caso en particular, no he tenido retrasos de ningún tipo, ni en consultas, ni en pruebas ni en las analíticas que me he tenido que hacer durante los últimos meses».

No obstante, ante la presión asistencial que los médicos, enfermeras y auxiliares de los centros de salud de Euskadi denuncian soportar desde hace años en la red sanitaria del Servicio Vasco de Salud, explica que «lo que sí creo es que los profesionales están más estresados que de costumbre, esa sensación me da. Lo noto en el lenguaje corporal, en cómo se mueven, cómo van de un lado a otro, la forma de hablar, en sus respuestas, se les ve más acelerados de lo habitual».

Publicidad

A pesar de esta reflexión que hace este amaratarra, insiste en que como paciente «no tengo quejas en ese sentido, sabiendo cómo sé cual es su situación laboral». «Y lo que sí conozco, confirmado por personas que están trabajando en el Hospital Universitario Donostia, es que están hasta arriba de trabajo. Y las versiones que me llegan son las mismas desde diferentes personas».

June Lamarca | Parte Vieja, 29 años

«Llevo 2 meses para ir al otorrino y ahora igual me lo cancelan»

A esta vecina de la Parte Vieja no le quedó más remedio el lunes que acudir de manera presencial al ambulatorio de Amara Berri para solicitar una cita en este centro de salud. «Esta mañana he estado dos horas intentando hablar por teléfono con alguien del ambulatorio para coger cita y no ha habido manera, he tenido que venir de manera presencial. Dos horas llamando sin respuesta, tanto al ambulatorio como al teléfono del consejo sanitario. Y nada», cuenta. Tras lograr su objetivo, salía del centro de salud convencida, a los profesionales sanitarios se les «nota con estrés y sobrecarga de trabajo».

Publicidad

La convocatoria realizada por los sindicatos vascos para hoy a las 13.00 horas delante de los centros de salud de Atención Primaria para «rebelarse» contra una situación que consideran «insostenible» por la presión asistencial que perjudica tanto a los profesionales como a la ciudadanía, también le afecta a ella. Cuenta su caso. «Tengo cita para el otorrino el día 24 de enero y llamé para cogerla hace un mes. Pero creo que es algo común, siempre que llamo para estas cosas me dan cita a dos o tres meses vista. Lo que pasa es que ahora me han dicho que igual se cancela, algo que no me haría ninguna gracia. Yo estoy operada del oído, noto que tengo pérdida auditiva y necesito que me vea un médico. Y esa preocupación es algo que tienes día a día».

Nely Cruz | 37 años

«En julio tuve que acudir a la privada, no podía esperar»

A las puertas del ambulatorio de Amara Berri, tras hacerse una ecografía, Nely Cruz explica que «ya no aguantaba más el dolor en la cadera y pedí esta prueba el pasado 12 de noviembre. No me parece normal tener que esperar tanto tiempo para algo así», dice. Considera que la pandemia del coronavirus SARS-coV-2 ha provocado que todo lo relacionado «con las citas para acudir a las consultas se está alargando demasiado en el tiempo. Y hay muchas personas con problemas de salud fuertes y graves y deberían dar las citas a más corto plazo. Y eso se soluciona con más personal. Hay pocos trabajadores», cree.

Publicidad

Es algo que también percibe al intentar contactar por teléfono con su centro de salud. «No sé porque hay tanto atasco de llamadas, deben estar colapsados y faltan profesionales».

No es esta la única experiencia negativa que ha tenido esta vecina de Hernani durante este año con Osakidetza. «El pasado mes de julio tuve problemas en el oído y acabé teniendo que pagar un buen dineral para que me atendieran en una clínica privada. Estaba con mucho dolor y la cita en el Servicio Vasco de Salud me la dieron a tres meses vista. No aguantaba y opté por acudir a la privada», explica.

Javier Mujika | Sitges (barcelona), 69 años

«Es necesaria una atención más inmediata»

Este vecino de Sitges se encuentra en Donostia para «atender a su madre». Cuenta que por la pandemia su ama «no puede salir de casa y tengo un hermano recién operado que tampoco puede hacerse cargo de ella y ayudarle con las revisiones que tiene asignadas. Vengo a echar una mano a la familia». Y como si fuera un mantra de todos los pacientes que salen del centro de salud, confirma que «vengo a hablar personalmente con el médico de mi madre porque por teléfono no responden, es imposible».

Noticia Patrocinada

Explica que con su madre «los médicos y enfermeras tienen que ir a casa y la verdad es que está contenta con ellos. Le acaba de dar un pequeño infarto y le han atendido muy bien. Lo que pasa es que tiene más problemas, uno de elllos en el oído. Y para tratarle esto, le atienden cuando les da la gana. Le dan cita a mucho tiempo vista, en su caso para dentro de dos o tres meses. No es muy normal, con el oído sangrando como lo tiene. Creo que sería más lógico tener una asistencia más inmediata».

Cree Javier Mujika que «ahora con el coronavirus tienen la excusa para darte largas y parece que toda la sanidad está centrada en luchar contra ese patógeno. Pero hay que atender también otras patologías», señala este vecino. No obstante, también reconoce que «a pesar de la situación que atraviesa el Servicio Vasco de Salud, la atención que ofrece es mucho mejor que la que tenemos en Cataluña».

Publicidad

Pilar Lorea | Amara Berri, 73 años

«He desistido de llamar a Osakidetza, es desesperante»

Ahora mismo no tengo problemas de atención, pero cuando empezó lo del coronavirus fue horrible. Solía pensar, '¡Olajá no me pase nada!'. Es que no te atendían», cuenta Pilar Lorea. Ella, como la gran mayoría de los pacientes consultados en este reportaje, pone el foco en la «deficiente atención telefónica» que ofrece el Servicio Vasco de Salud. «¡Olvídate del teléfono!», dice al nombrárselo.

«Tienes que venir al centro de salud. Ya he desistido de llamar a Osakidetza». Ella explica que «cuando tengo que hacer una consulta o lo que sea en el médico del centro de salud, vengo directamente de forma presencial. Con lo que ello puede suponer de modificar lo que tengas que hacer en tu día a día. Lo del teléfono es desesperante. Lo que creo es que los profesionales no te pueden atender, no dan a basto».

Publicidad

Sobre las reclamaciones y denuncias que los sindicatos, plataformas y movimientos ciudadanos llevan realizando desde hace tiempo, Lorea señala que «la atención a la ciudadanía ha empeorado porque falta personal, es que es normal que estemos así». Y continúa, «para tonterías, para cosas que no son necesarias, lo que haga falta por parte de las instituciones, pero para la sanidad no hay los recursos que son necesarios. Reforzar la sanidad es primordial. La atención que se ofrece ahora en Osakidetza ahora deficiente», sostiene.

José Manuel Jiménez | Gros, 70 años

«Todo lo relacionado con Osakidetza es complicado»

La situación que están viviendo los profesionales sanitarios de Atención Primaria se transmite directamente a los pacientes y ciudadanos de a pie. Porque evidentemente están sobrepasados de trabajo. No te responden al teléfono, tienes retrasos en las citas. Todo lo relacionado con Osakidetza y los centros de salud es bastante complicado», señala sin dudar este vecino de Gros que acompaña a su hermano al centro de salud de Amara. «Nuestro ambulatorio no es este, es el de Gros. Pero nos han derivado aquí. No nos han dado explicaciones, pero quiero pensar que es por la sobrecarga del centro de salud de Gros».

Publicidad

«Y lo del teléfono es insufrible», continúa. «He pasado días para poder contactar con el ambulatorio. Y siempre a través de una máquina, algo que en mi opinión no es nada agradable. Sientes impotencia». A favor de los profesionales, dice que «a pesar de la presión que tienen, son amables y sacan el trabajo como buenamente pueden. Pero sí están saturados, estresados, y se les nota».

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete los 2 primeros meses gratis

Publicidad