Retoman dos años después la excavación del túnel del Topo bajo La Concha
La rozadora reanudó este jueves los trabajos tras haberse reforzado el terreno para garantizar la seguridad en los 150 metros que faltan por horadar hasta la estación del Centro
La excavación de la variante del Topo bajo la playa de La Concha se retomó este jueves tras un parón de casi dos años por unos socavones provocados por las obras a mediados de 2020 en las inmediaciones de la calle Zubieta de San Sebastián. Con tres meses de retraso sobre la fecha anunciada inicialmente por el Gobierno Vasco, que preveía retomar los trabajos en el túnel que discurre debajo de la playa a finales de enero, las labores de reforzamiento del terreno han permitido que la rozadora accediera a principios de esta semana al punto del túnel donde se detuvo la excavación hace dos años. Este jueves mismo empezó a horadar de nuevo el terreno.
La reactivación de estos trabajos en pleno centro de San Sebastián permite atacar los cerca de 150 metros que separan la zona de 'los relojes' de La Concha del extremo norte de la futura estación Centro - La Concha. Se trata del tramo más sensible y costoso de la variante soterrada que unirá Lugaritz y Easo. La rozadora ha llegado hasta el subsuelo de La Concha introduciéndose a través de la boca de obra que se encuentra en las inmediaciones del polideportivo Pío Baroja. Se trata de una máquina nueva de 110 toneladas que no participó en los trabajos que se tuvieron que paralizar en junio de 2020.
Con la reanudación de las obras en el tramo de La Concha – Euskal Trenbide Sarea (ETS) puntualiza que los trabajos no han estado parados en los últimos meses, sino que lo que ahora se retoma es la excavación–, la variante del Topo encara la recta final para terminar de construir el 15% de túnel que falta de los 4,2 kilómetros que conforman esta pasante ferroviaria. A pesar del retraso de casi dos años que ha provocado el socavón generado en junio de 2020 bajo algunos edificios de la calle Zubieta, ETS mantiene la previsión de que la nueva variante soterrada del Topo pueda estar operativa para el primer semestre de 2025. La finalización del túnel que unirá la zona de la playa con la estación del Centro se prolongará al menos un año. La idea de ETS es «avanzar con la máxima seguridad».
El túnel bajo La Concha deberá ser totalmente estanco y seco, como ha exigido la Dirección General de Costas, que el pasado noviembre concedió el permiso para retomar la excavación tras una ardua negociación técnica con el Gobierno Vasco. Esa autorización de Costas, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica, era preceptiva ya que los 80 metros que discurren bajo la playa –el túnel se está excavando a 40 metros de profundidad– pertenecen a dominio marítimo-terrestre, por lo que Costas debía revocar la orden de paralización de la obra que emitió en agosto de 2020 y que exigía un estudio completo de la composición del terreno.
Asentar el macizo rocoso
Desde que Costas emitió la autorización para retomar el túnel el pasado noviembre, los trabajos de ETS se centraron en asentar el macizo rocoso con el objetivo de endurecerlo al máximo. Para ello se han aplicado tratamientos recomendados por el Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (Cedex). Se ha lanzado lechada de cemento desde el interior del túnel hacia la roca para reforzar el hueco con una corona de material endurecido. También se han aplicado inyecciones de cemento de modo horizontal. A principios de este mes se demolió el tapón de hormigón con el que se cerró el túnel tras los problemas de junio de 2020 y este jueves la máquina rozadora empezó a horadar de nuevo el terreno.