La obligatoriedad de Multikirola para jugar en un club queda suspendida al menos hasta dentro de dos cursos

De esta manera, cualquier alumno de entre 8 y 12 años que quiera jugar en un club o en una escuela deportiva no estará obligado ya a la vuelta de las vacaciones de Semana Santa a acudir a la actividad de entrenamientos que su centro escolar organiza bajo el paraguas del Multikirola.

Así lo han confirmado fuentes del departamento de Cultura, Cooperación, Juventud y Deportes, que admiten la suspensión temporal de este requisito. El futuro del programa Multikirola queda así a la espera del Tribunal Supremo, que debe decidir sobre su legalidad o no tras el recurso presentado por la propia Diputación contra la sentencia del TSJPVsobre el fondo de la cuestión.

El efecto de esta decisión se podrá empezar a comprobar a partir del lunes, día en el que los alumnos volverán a las clases y los entrenamientos se retomarán en los centros escolares. Quien considere que está apuntado al Multikirola obligado para después poder jugar en un club estará en su derecho de dejar de acudir al deporte escolar. Este curso hay 17.910 escolares en Gipuzkoa apuntados, de los cuales 11.283 lo compaginan con al menos un club.

Alicia Buendía, del despacho Arruti Abogados y representante de la familia de Pasaia que recurrió la obligación de que sus hijas tomaran parte en el programa Multikirola para poder inscribirse en la escuela de baloncesto de Askatuak, explica que «el auto nos ha sido comunicado hoy -martes-, por lo que para que sea firme deben pasar 20 días hábiles».

No obstante, la Diputación anunció este martes su intención de no recurrir esta decisión judicial, al tiempo que fuentes del área de Deportes señalaron a este periódico que la acatan desde «este miércoles mismo» y que permitirán que los alumnos que no deseen seguir en Multikirola hasta fin de curso dejen de hacerlo sin que por ello se les impida inscribirse en un club deportivo, porque «las familias están en su derecho».

De todos modos, las consecuencias reales serán más notorias el próximo curso, ya que ahora apenas queda un mes para terminar la temporada 2024/25 del Multikirola. Los plazos de la Justicia y en particular del Tribunal Supremo hacen prever que no dictamine sobre el fondo del asunto y, por tanto, aclare la legalidad o no de la medida hasta dentro de unos dos años. Quiere ello decir que lo previsible es que la no obligatoriedad de compaginar ambas actividades se prolongue todo el curso que viene y el comienzo del 2026/27.

Todo empezó cuando una familia de Pasaia con hijas de 9 y 11 años y aficionadas al baloncesto presentó en 2023 un recurso contencioso-administrativo para reclamar que ellas pudieran estar inscritas en el club Askatuak de San Sebastián sin tener que tomar parte del programa de deporte escolar de la Diputación de Gipuzkoa. El TSJPV emitió el pasado 22 de enero una sentencia en la que tumbaba esa exigencia, vigente desde los años 90, de que todos los menores de 13 años tuvieran que realizar deporte escolar si deseaban competir con un club deportivo.

Los motivos expuestos por la abogada Alicia Buendía en la petición de ejecutar ya la sentencia son que «la interposición de un recurso de apelación –presentada por la Diputación en marzo– no impide la ejecución provisional de la sentencia recurrida». Explica que el hecho de que la hija mayor ya no pueda verse beneficiada por el fallo al tener ya más de 12 años «es ejemplificativo y muy significativo de los graves efectos que el paso del tiempo tiene en la efectividad de la sentencia que nos ocupa».

Asimismo, la hija pequeña –que sigue en edad de Multikirola– «deberá soportar la obligatoriedad durante un año más», y un tercer descendiente «durante tres años más salvo que el recurso de casación –ante el Tribunal Supremo– se resuelva con celeridad», lo que parece improbable.

Añade que «aguardar al pronunciamiento del Tribunal Supremo sobre la casación de la sentencia provocará perjuicios ya no de difícil reparación, sino de imposible reparación por cuanto el tiempo que las hijas perderán es lógicamente irrecuperable».

La sentencia del TSJPV aludía a que la exigencia de alternar Multikirola con la inscripción en un club deportivo «atenta contra el derecho individual de los menores al condicionar las actividades de enseñanza a la participación de los escolares en las competiciones a través de los centros escolares en el programa Multikirola».

Además, la parte recurrente entendía que la obligatoriedad «contradice» el Estatuto de Autonomía del País Vasco y la Ley vasca del Deporte, donde se subraya que «la práctica de la actividad física será preferentemente polideportiva y no orientada exclusivamente a la competición». En la Ley vasca del deporte se refleja que entre los 6 y los 12 años «se garantizará una actividad física lúdica y polideportiva», un matiz importante porque el TSJPV entendió en su sentencia que la norma «garantiza esa oferta polideportiva, pero en modo alguno la impone». En Bizkaia y Álava, por ejemplo, «se sigue un modelo de polideportividad preferente, pero en ningún caso obligatorio», recuerda.

La Diputación de Gipuzkoa presentó el 4 de marzo ante el TSJPV el escrito de recurso al considerar que «la resolución impugnada tiene un impacto mucho más amplio que el caso concreto de la familia denunciante, afectando a miles de escolares, clubes deportivos, centros educativos y administraciones públicas implicadas».

El auto conocido este martes, en cambio, no aprecia «un perjuicio superior para el interés general». Es más, señala que al considerar un perjuicio la supresión de la obligatoriedad de practicar múltiples modalidades deportivas la Diputación «se apoya en una mera conjetura sin apoyo probatorio alguno», y recalca que «se trata de una presunción que no existe en otras partes del País Vasco ni tampoco de España».