El incumplimiento de la norma frente al Covid se salda con 185 sanciones al día

La pandemia ha traído dos estados de alarma, con su consiguiente normativa, que pese a ser más estricta en primavera, con el confinamiento domiciliario, sigue limitando la movilidad, entre otras restricciones. La Ertzaintza y las Policías Locales vascas han interpuesto una media de 185 sanciones al día por incumplir la normativa, que implica salidas fuera del horario permitido de toque de queda o saltarse el cierre perimetral, entre otros. Los primeros meses, cuando el aislamiento era obligatorio, los agentes sorprendieron a miles de personas fuera del hogar sin motivo aparente, quienes recibieron la denuncia correspondientes. Sin embargo, los quebrantamientos no desaparecieron con la desescalada.Si desde marzo del año pasado se han realizado unas 70.000 denuncias, desde el 18 de junio, cuando dio comienzo la 'nueva normalidad', se han hecho 50.000 -24.000 por Policías Locales y 26.000 por la Ertzaintza-, según figura en la memoria del Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco sobre el balance del primer año de pandemia.

Las infracciones a las restricciones para hacer frente al Covid-19 continúan. Un total de 26 personas fueron denunciadas durante la madrugada del viernes al sábado en la CAV por incumplir la normativa sanitaria. Uno de los escenarios fue Irun. En la ciudad fronteriza, sobre las cinco menos cuarto de la madrugada de ayer, la Ertzaintza fue alertada de una fiesta en una habitación de un hotel. Quien dio el aviso fue la recepcionista del alojamiento. Los agentes que se acercaron al lugar se encontraron con seis personas que estaban de celebración, si bien solo tres estaban registradas como huéspedes en la habitación. Todas ellas fueron denunciadas tras ser identificadas. Incumplían la norma que regula las reuniones a cuatro personas como máximo.

Esta no fue la única intervención de la Policía Autonómica. En Bilbao sancionaron a siete personas en una vivienda del barrio de Txurdinaga y a otras cinco en Busturia por permanecer en el interior de una vivienda sin ser convivientes. Otra de las sanciones incoadas en Bizkaia fue a un grupo de ocho personas interceptadas en las inmediaciones de un bar del municipio de Basauri, sobre las seis menos cuarto de la madrugada. Las denuncias fueron interpuestas por estar en la vía pública sin causa justificada, después de que particulares alertaran a la Ertzaintza de que estaban generando ruido y molestias en la vía publica.

Estos sucesos ocurren apenas dos semanas antes de la llegada de la Semana Santa y coincidiendo con el primer fin de semana de libre movilidad dentro de la CAV. La Ertzaintza y la Policía Local han reforzado los controles para estos días en los que la gente ha aprovechado para salir de su municipio, después de tres meses sin salir de él. En cualquier caso, el toque de queda desde las 22.00 horas hasta alas 6.00, las reuniones de cuatro personas como máximo y el cierre de la hostelería a las 20.00 horas siguen vigentes, así como la prohibición de salir de Euskadi.

En caso de que la pandemia no cese como se espera, el Gobierno Vasco no descarta volver a revisar las restricciones de movilidad. La Semana Santa será la próxima prueba de fuego a la que se enfrente la sociedad en un momento en el que se empieza a ver la luz al final del túnel con las vacunas. Los expertos, aun y todo, ya han empezado a advertir del riesgo de una cuarta ola.