La gripe se dispara en Gipuzkoa y «tensiona» las Urgencias de Pediatría

La tasa aumenta «de manera importante» en los tres territorios vascos, aunque es Gipuzkoa la que alcanza, con diferencia, los valores más altos rozando casi los 70 casos por 100.000 habitantes. No obstante, según aclara la jefa del servicio de Pediatría del Hospital Donostia, Cristina Calvo, la epidemia de gripe de este año «se está comportando como otras» y tampoco se observa una mayor virulencia del virus. Por ello, a pesar de que la incidencia esté disparada, «comparado con el año prepandémico 2019-2020 no estamos todavía en el pico epidémico», si bien afirma que las Urgencias están «tensionadas». «Como siempre durante la epidemia de la gripe, constatamos un aumento de las consultas en urgencias por fiebre y por cuadros respiratorios, y actualmente el 40% de los pacientes que acuden a Urgencias de Pediatría lo hace por estos motivos». Calvo admite que es un momento de «mayor presión asistencial» aunque no tan alta como la vivida hace unos meses con los casos de bronquiolitis, que saturaron las consultas y atenciones hospitalarias en Euskadi.

Según explica esta sanitaria, la mayoría de los cuadros de gripe en niños «no se complican y el tratamiento es sintomático de la fiebre, el dolor de cabeza y los dolores musculares», para lo que se puede recetar paracetamol e ibuprofeno. Así, el porcentaje de niños con gripe complicada que precisa ingreso es «mucho menor» que en los adultos, cuyos casos están teniendo una mayor «repercusión asistencial en hospitales».

En todo caso, las causas de ingresos pediátricos suelen ser «por complicaciones respiratorias, la más frecuente la neumonía», explica Cristina Calvo, que hace hincapié en las medidas de prevención dirigidas a la población, como «el lavado de manos tras el contacto con secreciones respiratorias; al toser y estornudar cubrirse la nariz y la boca con un pañuelo desechable o con el ángulo interno del codo y evitar llevar a la guardería o al colegio a los niños cuando están enfermos».

Además de la gripe, las infecciones respiratorias agudas (IRA) registradas por la red de Atención Primaria, como los adenovirus, rinovirus, SARS-CoV-2, Cov estacionales, virus respiratorio sincitial (VRS), metaneumovirus y parainfluenza, siguen en ascenso.

Por franjas de edad, en estos momentos el grupo más afectado por las diferentes infecciones respiratorias agudas es el de los bebés de 0 a 4 años, en los que la tasa de contagios alcanza los 2.119 casos por 100.000 habitantes, seguido por los niños menores de 5 a 14 años, donde se contabilizaron 733 contagios por cada 100.000 habitantes.

Asimismo, los casos de infecciones respiratorias ascienden en todos los grupos de edad con respecto a la semana previa, tal y como destaca el informe de Osakidetza. La tasa de infecciones respiratorias agudas registrada la semana del 20 de febrero ha sido de 531 casos por 100.000 habitantes frente a los 371 casos notificados la primera semana de enero. Por territorios históricos, Gipuzkoa vuelve a encabezar la lista, con 611 casos por 100.000 habitantes, frente a los 499 localizados en Bizkaia y 470 casos en Álava.

En el conjunto del Estado, son la Comunidad Valenciana (1.381) y Castilla y León (1.263) las autonomías que registran un mayor número de casos. A la cola se encuentran Galicia (258), Extremadura (299), Baleares (346), Andalucía (497) y Euskadi (528), que se sitúa muy por debajo de la media estatal (754 casos), según los últimos datos del informe epidemiológico del Instituto de Salud Carlos III.

Los casos más graves de infecciones respiratorias se dan en personas mayores de 64 años, (49,74 casos por 100.000 habitantes), seguido por el grupo de 0 a 4 años (21,86 casos por 100.000).

El comportamiento estacional de determinados virus respiratorios, como la gripe, que se presenta generalmente de octubre a marzo, se vio completamente alterado con la pandemia del Covid, cuando prácticamente no circularon enfermedades respiratorias distintas al coronavirus. Con la bajada de los contagios y el Covid a raya, la gripe reapareció la pasada primavera-verano, que registró un pico inusual y otro de magnitud limitada a finales de verano, hasta irrumpir con fuerza el pasado otoño y hasta finales de diciembre, cuando tanto los virus respiratorios como la gripe saturaron las Urgencias de Gipuzkoa. Calvo explica que «la distribución epidémica se está trastocando. De hecho, el año pasado la gripe no llegó a desaparecer».

También durante casi todo el año pasado hubo transmisión del VRS (virus respiratorio sincitial), causante de la bronquiolitis, cuya tasa en estos momentos desciende en Euskadi de los 228 casos por 100.000 habitantes la semana del 13 de febrero a los 155 casos registrados en la semana del 20 de febrero.