Las estafas informáticas multiplican por 20 a las presenciales en Gipuzkoa

El último caso desvelado por este periódico en Gipuzkoa, sin embargo, es la excepción que confirma la regla: una presunta estafa cometida por una empresa de instalación de duchas con sede física en Hernani y que embaucaba a sus víctimas mayoritariamente en persona. En cerca de 60 casos que ya investiga Kontsumobide, la firma Ducha Confort no llegó a empezar las obras o las dejó sin concluir. Un 'modus operandi', el de tratar con las potenciales víctimas cara a cara, que tratan de evitar otro tipo de ciberdeliencuentes que se escudan en llamadas de teléfono o comunicaciones online para eludir la interacción con sus víctimas.

Los datos de la Ertzaintza demuestran que ese tipo de delitos online van al alza en lo que va de año, mientras que las estafas presenciales registran en Gipuzkoa una bajada de las 246 del primer semestre de 2024 a las 178 del presente ejercicio. Las denuncias por ciberestafas, por su parte, aumentan desde las 3.527 de 2024 a las 3.602 del presente ejercicio, con datos hasta junio.

Entre los ciberdelitos, las estafas copan la primera posición de forma destacada, lo que contrasta con el escaso peso de esta tipología dentro de los delitos presenciales catalogados como 'contra el patrimonio y el orden socioeconómico'. Ahí los que se llevan la palma son los hurtos (3.763 registrados en Gipuzkoa en el primer semestre), seguidos de los robos con fuerza en las cosas (1.724 denuncias) o los robos con violencia o intimidación (248).

En cualquier caso, las estadísticas delictivas de la Ertzaintza muestran que en todos estos delitos presenciales se produce un leve descenso respecto al primer semestre del año pasado, lo que podría romper la tendencia al alza en los delitos que se viene dibujando desde la pandemia.