La demora para entrar en una residencia sube y ya hay 900 mayores en espera en Gipuzkoa
Desde que se solicita ingresar en un centro hasta que se consigue una plaza pasan, de media, más de cinco meses, esto es, 160 días
Las listas de espera para entrar a una residencia de mayores en Gipuzkoa siguen al alza tras la caída del coronavirus y ya son casi 900 los mayores que aguardan su turno para conseguir una plaza. Son un 8% más que el mismo mes que el año anterior, cuando había 831 personas en esta situación en el territorio. Tras la caída de la demanda por el coronavirus, las solicitudes han vuelto a aumentar y, junto a ellas, la demora. Mientras tanto, la mayoría de quienes esperan su turno (711) reciben alguna prestación en su hogar u hacen uso de otro tipo de servicio porque, en estos momentos, desde que se solicita el ingreso a un recurso de mayores hasta que se consigue entrar en él pasan más de cinco meses, en concreto, 160 días.
Las residencias de mayores son los recursos sociales que más peticiones registran, si bien hay quienes pese a tener una edad prefieren ir a un centro de día y vivir en su hogar. En estos casos, la espera es de casi tres meses –88 días– y hay 372 personas en lista aguardando su momento, según datos ofrecidos por la diputada de Cuidados y Políticas Sociales, Maite Peña, en una respuesta en las Juntas Generales a una pregunta realizada por Estitxu Elduaien (EH Bildu). A la espera de una plaza pública en una unidad residencial sociosanitaria guipuzcoana apenas hay cinco personas y la espera es de nueve días.
Aunque los recursos destinados a los mayores son los más demandados, debido a la crisis demográfica en la que está inmerso el territorio, no son los únicos que tienen lista de espera. Según las cifras aportadas por Peña, hay 115 personas que han solicitado una plaza en estos centros, en los que el tiempo medio de espera para obtener una cama es de casi un año o, lo que es lo mismo, 330 días. En cualquier caso, explica la diputada, «esta espera no ha sido real en algunos casos puesto que se trata de personas que han estado en otros recursos como talleres ocupacionales, ingresos hospitalarios o centros de salud mental y se les ha seguido manteniendo en lista de espera». Sin tener en cuenta a estas personas, el promedio del tiempo transcurrido entre la solicitud de la plaza y la obtención de esta es de 192 días. Es un mes menos que lo que también una persona con discapacidad tiene que esperar si quiere una plaza en un centro de día –141 días–. En este momento hay 52 personas en esta situación.
Los mayores, las personas con discapacidad y también aquellas que tienen algún tipo de problema de salud mental. Gipuzkoa lleva tiempo reforzando la atención a este último colectivo y en estos momentos hay 48 personas en lista de espera para obtener una plaza pública en una residencia de salud mental. Los días que pasan desde que hacen la petición hasta que lo consiguen son 196, esto es, más de medio año. Como ocurre en otro casos, si se tiene en cuenta que muchas de estas personas han estado mientras tanto atendidas en otros recursos psicoeducativos o en ingresos hospitalarios la espera baja a 131 días. En los centros de día, sin embargo, se reduce hasta poco más de un mes –45 días– y apenas hay cuatro personas en esta lista.
Otro de los servicios del departamento de Cuidados y Políticas Sociales que suele tener lista es el de atención temprana. Este área recoge el conjunto de intervenciones, dirigidas a la población infantil de entre 0 y 6 años, además de a sus familias y al entorno que les rodea. Desde una perspectiva interdisciplinar sanitaria, educativa y social, tienen por objetivo dar respuesta a las necesidades que presentan los menores con trastornos en su desarrollo o con riesgo de padecerlos
A lo largo de este año 483 personas solicitaron este servicio y de ellas han sido atendidas 356. El tiempo que ha transcurrido desde la solicitud hasta el alta en el servicio es de casi dos meses, en concreto, de 51 días.