El temporal amaina tras dejar rachas de viento de 142 km/h en Gipuzkoa

La alerta naranja por viento y olas se instaló ayer en Gipuzkoa durante toda una jornada en la que si bien no se produjeron destrozos de importancia, sí que se dieron afecciones puntuales coincidiendo con las rachas de viento más intensas tanto en las calles, con la caída de árboles y cascotes, como en el tráfico aéreo y ferroviario, interrumpido durante horas.

Las rachas de viento llegaron a alcanzar los 142 kilómetros por hora en Donostia -hacia las 17.00 horas-, donde los guardias municipales tuvieron que retirar contenedores desplazados a la calzada en varias calles, así como apartar elementos caídos de fachadas en obras. Protección Civil de Donostia comunicó que se realizaron más de cien intervenciones por caída de árboles, cascotes, contenedores,ramas o telas de andamios. Los bomberos de la Diputación Foral de Gipuzkoa también tuvieron que realizar varias salidas para retirar tejas de techos en Irun y Errenteria, reparar antenas dañadas en Azpeitia o arreglar tejados de Uralita en Orio.

La racha más fuerte detectada en Jaizkibel alcanzó los 122 kilómetros por hora y tuvo sus consecuencias en el funcionamiento del aeropuerto de Hondarribia. Un vuelo proveniente de Madrid tuvo que ser desviado a Pamplona por la tarde, otro que salía del aeródromo guipuzcoano hacia la capital española fue cancelado y un tercero que iba a aterrizar en Hondarribia se dio media vuelta para volver a Barcelona y no volver a despegar. El tráfico ferroviario también tuvo que ser interrumpido en Gipuzkoa, en la línea de Renfe, por la caída de varios árboles entre Legorreta y Tolosa, lo que provocó retrasos en el servicio a última hora de la tarde mientras los troncos eran retirados.

La intensidad del viento deparó el mejor escenario para quienes buscan el subidón de adrenalina asomándose a ver las olas del Paseo Nuevo donostiarra. El Ayuntamiento mantuvo cerrado el acceso del paseo para todo tipo de vehículos, pero permitió el paso de peatones y fueron varios los grupos de personas que lo transitaron para presenciar semejante espectáculo de la naturaleza. Las olas llegaron hasta los seis metros aunque no causaron desperfectos.

Camión cruzado en Irun

La mayor peligrosidad de la jornada la provocaron las tormentas de granizo que se repitieron durante la tarde, cubriendo de piedras de hielo las carreteras del territorio. No obstante, el temporal no causó especiales estragos en el tráfico. El accidente más reseñable ocurrió sobre las seis de la tarde, cuando un camión se salió de la calzada en Irun, en el kilómetro 4 de la AP-8 sentido Francia.

El trailer, que transportaba toneladas de fruta, impactó contra la mediana, y como consecuencia hizo la tijera y quedó atravesado en la vía, ocupando los carriles de izquierdos de ambos sentidos. Dispositivos de la Ertzaintza se trasladaron al lugar del accidente, en el que no hubo que lamentar heridos, para señalizar el cierre de los carriles ocupados por el camión, pero el tráfico siguió abierto por las vías derechas, tanto en sentido Donostia como dirección Francia. En el resto de la jornada no se registraron accidentes de importancia, debido, en parte, al escaso tráfico.

El tiempo mejora hoy, con la única advertencia para quienes se dispongan a salir al mar del aviso amarillo por riesgo marítimo costero en las dos primeras millas durante las primeras horas del día. Por lo demás, el viento se fijará del suroeste, sin las rachas de ayer, y los chubascos remitirán para primeras horas. Por la tarde se abrirán numerosos claros. Las temperaturas subirán, incluso volveremos a valores de 17 grados en la costa y 14 en el interior.