Karlos Arguiñano se adelanta al carnaval con una nueva máscara
El cocinero más televisivo sorprende con un curioso disfraz tras la grabación de su último programa de Cocina abierta de Antena 3
San Sebastián
Miércoles, 7 de febrero 2024, 18:25
Con más de tres décadas de experiencia televisiva a sus espaldas Karlos Arguiñano aún consigue sorprendernos a sus seguidores a diario. Ya no es solo que riegue de buen humor los platos que va elaborando en su programa 'Cocina abierta', además en sus redes sociales va dejando con frecuencia su peculiar receta de simpatía, chispa y cercanía.
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El cocinero guipuzcoano, de 75 años, aparece en uno de los vídeos de sus redes sociales ataviado con una curiosa máscara que incorpora una vistosa txapela roja. «Acabo de terminar el programa de hoy, muchas gracias a todos, mañana Jueves Gordo, y otra vez a la cocina... más contento, más contento...», declara mirando a la cámara. Soltura y gracia no le falta al beasaindarra.
No desvela Karlos Arguiñano si en los programas que emitirá Antena 3 estos días aparecerá con este o algún otro disfraz, pero a juzgar por su gusto por sorprender a sus telespectadores no sería de extrañar. De hecho en años anteriores ya ha aparecido en nuestras pantallas ataviado de personajes árabes o asiáticos, siempre con una sencilla máscara y como mucho algún sombrero.
El propietario del restaurante Arguiñano de Zarautz ha confesado en alguna ocasión que le encanta ponerse esas máscaras en cualquier celebración familiar o fiestas y ver cómo se lo toman sus hijos y nietos. Como buen beasaindarra, los carnavales de la vecina localidad de Tolosa han marcado sin duda su calendario durante su juventud.
La anécdota de Arguiñano en carnavales
En su programa 'Cocina abierta' emitido en febrero de 2020 incluso llegó a elaborar todas sus recetas vestido de personaje árabe, con turbante y máscara incluida, y además imitando continuamente un acento de la zona. «Arguiñano se ha ido al carnaval, y tengo que terminar la receta», comenzaba aquel día.
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En otro programa recordaba una de sus anécdotas de joven, 55 años atrás, tras celebrar por todo lo alto una jornada de carnaval. «Me había vestido de ciclista a las seis de la tarde anterior y aparecí en el barrio a las once de la mañana, con mi camiseta, mi gorra, mi tubular al hombro... y me tocan en la espalda y era mi padre, que me dice 'el coche escoba'.. vaya susto que me dio... jaja... enfilé para casa directo», recordaba.
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