Carlos Iturgaiz: «El voto a Mendoza será un gesto patriótico para que EH Bildu no gobierne la Diputación»

– El 28-M incrementaron sus concejales y junteros en un 30% respecto a 2019. ¿A qué atribuye este resultado?

– Estamos muy satisfechos. Hemos elegido buenos candidatos y realizado una campaña sobre el terreno. La gente ha dado un aviso. El PP no era un referente político en el ámbito foral o municipal vasco y ahora sí lo es.

– ¿Les ha sorprendido el resultado en Gipuzkoa, un territorio complicado para el PP?

– Llevábamos años cayendo y ahora empezamos a subir. El giro se ha dado porque los ciudadanos han visto un partido unido y un proyecto basado en gente joven, algunos de ellos con experiencias en las instituciones, como Borja Corominas, Mikel Lezama o Muriel Larrea. Personas con brío y ganas de cambiar las cosas. Los guipuzcoanos saben que el freno a la radicalidad de EH Bildu está en el PP y eso ha descolocado al PNV y al PSE.

– ¿Se ha perdido el miedo a ser candidato del PP o votante de su partido?

– La gente ha perdido el miedo y se expresa en las urnas, pero el temor sigue existiendo a la hora de dar el paso para ser candidato. De hecho, tenemos muchos votos en municipios donde carecemos de candidatos locales. Si los tuviéramos el resultado habría sido todavía mejor. Ha quedado demostrado que la gente quiere votar PP.

– No obstante, el gran ganador ha sido EH Bildu. ¿Qué opina?

– Es preocupante. Captan votos de gente joven que apuesta por la radicalidad. Han introducido etarras en las listas y apoyar a EH Bidu es aplaudir a quienes han provocado una tragedia en este país. Han entronizado a 'Txapote' como víctima, cuando debería estar en un museo de los horrores. A pesar de eso se les vota.

– En Donostia no incrementan el número de concejales, en cambio sí suben de uno a tres junteros. ¿Les ha penalizado que en San Sebastián se haya presentado Vox?

– Blanco y en botella. Hice hincapié en la campaña en que el voto útil del centroderecha estaba en el PP y que de no hacerlo los beneficiarios serían EH Bildu y el PNV.

– ¿Han recuperado voto que en su día se fue al PNV?

– Ellos lo niegan y dicen que les ha perjudicado la abstención. Eso es cierto, pero también lo es que una parte ha vuelto al PP. Y esto va a más porque hay mucha gente que nos dice que en las municipales ha votado al PNV, pero que en las generales lo hará al PP porque se trata de derogar al sanchismo que tanto daño ha hecho a España y al País Vasco. Ese san chismo se afincó en España porque el PNV le apoyó y Ortuzar sigue insistiendo en que su apuesta es Sánchez. Por tanto, votar al PNV es votar a Sánchez y hay muchos simpatizantes del PNV que no están de acuerdo.

– ¿Se puede decir que el PP vasco ha comenzado a recuperar el sitio perdido en estos años?

– Sí, y además somos la llave para dar con las puertas en las narices a EH Bildu en las instituciones porque es un partido antidemocrático. De hecho, nos querían matar. ¿Qué pasaría si en el Bundestag los partidos democráticos pactasen con los nazis? Se armaría un follón tremendo. Pues aquí lo mismo, con mi voto no accederán a las instituciones.

– Eso supone dar sus votos gratis para que la jeltzale Eider Mendoza sea diputada general y no Maddalen Iriarte, de EH Bildu.

– Hay que diferenciar. Vamos a desalojar a EH Bildu, pero no daremos un cheque en blanco al PNV y al PSE. Nosotros somos la llave para dotar de estabilidad a la Diputación de Gipuzkoa. Esos dos partidos se han blindado con un pacto en el que no dejan entrar a nadie. Es decir, han vuelto al escenario de 2019, pero con la enorme diferencia de que ahora carecen de mayoría absoluta.El mapa político es diferente y no lo quieren ver. No han hecho autocrítica. Cometen un error. El PP tiene la llave para cerrar la puerta a EH Bildu y a su vez ofrecer estabilidad. La legislatura es muy larga, cuatro años donde van a necesitar al PP para aprobar los presupuestos y las diversas normas forales.

– ¿Pero van a votar a favor de Mendoza para que no salga Iriarte, sí o no?

– Evidentemente sí. Como dijo Feijóo, será un gesto patriótico, como los que el PP vasco realizó defendiendo la libertad en esta tierra cuando ETA nos mataba. El PP se mantuvo aquí, sin bajar la persiana. También es un gesto patriótico para que EH Bildu no gobierne en la Diputación. Por eso votaremos a Mendoza. No hay duda.

– Alguna duda hay. El PP de Gipuzkoa parece estar yendo por libre porque mientras que Feijóo y usted están dispuestos a dar los votos gratis, ellos piden entrar en el Gobierno foral como contraprestación, un órdago que de no ganarlo llevaría a EH Bildu al poder...

– Lo que han dicho todos mis compañeros está bien. Saben cuál es el planteamiento del PP.

– Pero si exigían entrar en el Gobierno para apoyar a Mendoza, el mensaje era distinto al voto sin contraprestaciones anunciado por Feijóo.

– Nosotros decimos que la estabilidad se da con la entrada del PP en el Gobierno de la Diputación.

– ¿La no entrada conlleva que no apoyarán a Mendoza?

– La investidura solo dura un día, pero la legislatura dura cuatro años y necesita estabilidad para sacar los proyectos adelante.

– También es posible que el Gobierno foral vaya sacando la legislatura adelante pactando con unos u otros en función de sus necesidades...

– Allá ellos, pero estarán al albur de la inestabilidad. Claro que lo pueden hacer y lo intentarán, pero lo tendrán difícil, porque no veo a EH Bildu prestándoles su apoyo o a Podemos, que quiere llegar a acuerdos con la coalición abertzale. El PP, en cambio, se lo pone muy fácil. Lo dice la ciudadanía vasca que ha colocado al PP como un referente.

– ¿Por qué quieren entrar en gobiernos PNV-PSE, cuando las políticas del PP distan de parecerse a las de estos dos partidos?

– El PP y el PNV estamos muy cerca en cuestiones fiscales, económicas y empresariales. Es verdad que el PNV en los últimos tiempos se ha mimetizado de las políticas de Sánchez. Por ejemplo, se han negado a bajar impuestos. A mí me hace gracia cuando dicen que son de izquierdas, verdes e independentistas y, sin embargo, cuando miro las bancadas del PNV pienso que estas señoras y señores por la forma de pensar, de vestir y de comportarse si fueran de Guadalajara serían del PP.

–¿Le ha sorprendido el 'no' tajante del PNV y del PSE a la entrada del PP al Gobierno foral de Gipuzkoa?

– Sí, perdieron las formas. A muchos burukides les sorprendió cómo desde el minuto uno mordieron la mano que te da de comer. Intentaron humillar al PP, que es la clave de la estabilidad, cuando ellos han perdido las elecciones. El PNV se ha llevado un revolcón de la leche.

– ¿Para favorecer esta gobernabilidad en la Diputación de Gipuzkoa y en otras instituciones, Laguardia y Labastida, donde ganó el PP, deberían tener alcalde de este partido?

– Así se lo hemos trasladado al PNV. Ganamos las elecciones en los dos municipios. La gente no entendería que el PP haga este gesto de desalojar a EH Bildu para que se aprovechen el PSE y el PNV y que estos últimos se vayan con EH Bildu para sacar al PP de las dos localidades donde hemos vencido. Pido racionalidad al PNV.

– ¿Tras estas elecciones, se siente fortalecido como presidente del PP vasco?

– Mi aportación ha sido unir al partido. Cuando yo llegué la situación era traumática, incluso se llegó a hablar de que íbamos a desaparecer en Euskadi. Los siguientes objetivos eran ensanchar ideológicamente el partido y dar un papel relevante a la gente joven. De hecho, Bea Fanjul es presidenta nacional de Nuevas Generaciones. Los jóvenes fueron el pilar fundamental de la resistencia cuando nos mataban y ahí está el ejemplo máximo de Miguel Angel Blanco. También me marqué como reto que el partido creciera electoralmente. Creo que a día de hoy he conseguido todos estos objetivos.

– ¿Está dispuesto a liderar de nuevo el PP vasco?

– Estoy a disposición del partido y del presidente.

– ¿Cuándo se celebrará el congreso regional?

–Lo más probable es que sea en otoño.