Carlos Iturgaiz: «Nos toca hacer ver al votante de Vox que también se identificará con PP+Cs»

-¿Cuándo se enteró de que le proponían como candidato?

-Pablo Casado me llamó el domingo hacia las 18.30 o 18.45 para decirme que la dirección del partido había decidido que Alfonso Alonso no fuera el candidato y que contaba conmigo.

-¿Le sorprendió?

-Sí, claro. Usted que es periodista sabe que no estaba en ninguna quiniela.

-Porque usted mismo decidió dejar la política el año pasado precisamente al sentirse «decepcionado» con el propio Casado, después de que este le relegase a los últimos puestos de la lista del PP para las elecciones europeas...

-Es cierto que quedé decepcionado y que abrí un paréntesis. Pero en la conversación con Casado sobre esa cuestión le dije que soy un hombre de partido y que quedaba a su entera disposición si en algún momento me necesitaba.

-¿Dudó en algún momento?

-No. Para mí es un orgullo repetir como candidato a lehendakari 22 años después. Agradezco la confianza y es un reto que afronto con toda la ilusión del mundo.

-¿Ha hablado con Alonso?

-Claro. Hablamos el mismo domingo y me deseó toda la suerte del mundo, cosa que agradezco.

-O sea que no teme que le vea como un traidor...

-No creo que me vea así. Él sabe que tras la decisión de no contar con él, la dirección nacional tenía que buscar un sustituto.

-¿Cuál es su relación con él?

-Muy buena. Entramos juntos en el PP y hemos crecido políticamente juntos desde las juventudes del partido. Solo tengo palabras de elogio para él.

-Sabe que su designación se interpreta como un nuevo exponente del giro a la derecha que ha imprimido Casado al PP...

-Yo no hablaría de giros. Ni creo que sea una cuestión relevante. El problema que tenemos es que hay en España un Gobierno socialista y comunista que se ha aliado con los independentistas y batasunos que quieren romper España.

-¿En qué se va a notar el cambio entre el modelo Alonso y el modelo Iturgaiz?

-Yo no hablaría de modelos ni de si uno es más o menos de derechas, sino de entender lo que tenemos enfrente. Un PSOE que ha renunciado a defender España, la Constitución y las libertades y se alía con los fasciocomunistas que quieren romper el país; un PNV que busca cambiar el sistema constitucional y ha demostrado su incapacidad para gestionar, como se ve con el caso del vertedero de Zaldibar, y que también tiene casos de corrupción, como el de De Miguel. Nos hemos quedado solos en la defensa de la unidad de España y la Constitución. Es lo que explica que vayamos con Ciudadanos: la creación de un proyecto sólido de defensa de España y de la libertad y que tratará de elevar la presencia de España en el País Vasco.

-¿Comparte entonces la tesis de Cayetana Álvarez de Toledo de que Alonso ha sido demasiado «tibio» con el nacionalismo?

-Ese es un tema que ya se habló y se debatió en su día y yo no voy a mirar atrás. Me quiero centrar en el futuro, que pasa por construir en Euskadi una alternativa que ejerza de dique de contención ante el nacionalismo y el frente popular conformado por socialistas, comunistas, separatistas y batasunos.

-¿El PP de Alonso no ha sabido interpretar esa realidad que usted describe y no ha sido un defensor de la Constitución y la unidad de España?

-Muchos han sentido que no era así y se han ido a Vox. Nuestro reto es hacer ver a todos ellos que hay un PP con las ideas muy claras, sin complejos a la hora de defender la unidad de España y que tiene los mismos valores de siempre. Yo sigo defendiendo lo mismo que defendía hace 22 años, muchas de las cosas que también defiende Vox. Ante esta situación, lo idóneo es aglutinar el voto para que el centro-derecha cuente con la mayor representación posible en Euskadi. Y quienes somos capaces de aglutinar y sumar más somos PP+Cs, el voto útil.

-Hace 22 años ETA actuaba y extorsionaba, secuestraba y mataba. Y hace casi nueve años que ya no actúa y la banda se ha disuelto. ¿Tiene sentido mantener el mismo discurso?

-ETA ya no está pero sí su ideario. Y quienes les apoyaban y siguen sin condenar los asesinatos, como EH Bildu, están en las instituciones y además aliándose con el Gobierno del PSOE y Podemos. Alguien tiene que denunciar eso y situaciones como los 'ongi etorris' a presos de ETA. Y el PP va a seguir sin callarse.

-Achaca la pérdida de votos a la «desilusión» del votante, pero el declive del PP comenzó antes de la irrupción de Vox, con los casos de corrupción, aunque no afectaran al partido en Euskadi...

-Es cierto que la pérdida de votos obedece a cuestiones propias del País Vasco y otras ajenas, como la corrupción. Pero el PP ya ha sido castigado con dureza por eso, y más que otros que también tienen casos de corrupción, como el PSOE con los ERE de Andalucía, o el PNV con el caso De Miguel. Pero eso está pasado y ahora toca hacer ver a los votantes que se han ido a Vox que en el proyecto PP+Cs tienen un referente en el que se van a sentir identificados con sus valores.

-¿Habría apoyado usted los Presupuestos del Gobierno Vasco como hizo Alonso al inicio de legislatura, o pactado la reforma fiscal, o suscrito un acuerdo para la reforma de la RGI?

-Ese entendimiento se dio cuando el PNV apoyaba al Gobierno de Rajoy. Pero fue el PNV el que dinamitó los puentes al apoyar la moción de censura. El PP ha sido siempre pactista y generoso, como cuando Aznar llegó a un acuerdo con el PNV sin que necesitara sus votos, o cuando permitimos que Patxi López fuera lehendakari sin pedir absolutamente nada a cambio.

-¿Ese entendimiento puede entonces volver a darse?

-Con este PNV, no. ¿Cómo se puede pactar con quien quiere romper España? Hay que tener unos principios y valores éticos.

-¿Le gustaría que Vox se uniese a la coalición PP+Cs?

-Con Vox hay cosas que nos unen pero muchas que nos separan, como nuestra defensa de la foralidad y el autonomismo, o la concepción de Europa. Es una hipótesis que no se contempla ahora.

-¿Mantiene relación con Santiago Abascal, con quien coincidió en el PP?

-Efectivamente, él era el presidente de las nuevas generaciones del PP vasco cuando yo era presidente. Mantenemos una relación fantástica y solo puedo decir de él que es una persona maravillosa.

-¿Teme que esta crisis provoque una división en el PP vasco entre 'alonsistas' y 'casadistas'?

-No. Vamos a remar todos en la misma dirección. Este partido se ha construido y hecho fuerte a través de sangre, sudor y lágrimas, en momentos terribles. Lo mejor que tenemos son nuestros militantes y cargos. Son mi referente.

-¿Es asumible que en una debacle electoral que les diese 5 o 6 diputados, 2 sean de Cs y el PP se quede con solo 3 o 4?

-Por encima de los puestos o los intereses de partido está la unión de quienes comparten proyecto.

-¿Ha sido el PP vasco el pagano de la negativa de Feijóo a aliarse con Cs y una forma de compensar al partido naranja y allanar el pacto en Cataluña?

-Lo importante era sumar y replicar un modelo que ha funcionado con éxito en Navarra.

-Tras la dimisión de Alonso. ¿Se ve de nuevo como presidente del PP vasco?

-Ni me lo planteo. Ahora estoy centrado en las elecciones.