Un récord de operaciones en Gipuzkoa distorsionado por el cambio de tipo variable a fijo

¿Cómo es posible entonces que las compraventas y la firma de hipotecas arrojen estos máximos cuando diferentes expertos auguran una ralentización en estas operaciones? La razón la encontramos en las novaciones, que también registran un máximo histórico en 2022. Y es que cualquier cambio que se produzca en las condiciones del préstamo hipotecario posterior a la firma se computa como nuevas hipotecas al tratarse de un protocolo notarial nuevo, y no responde realmente a la firma de nuevas hipotecas como tal. Esta es una de las razones que explican el récord de hipotecas en Gipuzkoa en los últimos doce años.

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El notario donostiarra Javier Oñate explica esta distorsión en el récord de la firma de hipotecas, y asegura que este máximo registrado en 2022 se debe sobre todo «a la refinanciación de estos préstamos o al cambio de tipo. En nuestra notaría apenas vemos la firma de nuevas hipotecas, mientras que las operaciones de cambio de tipo de variable a fijo se han disparado». En el territorio se llevaron a cabo 946 novaciones hasta octubre, 50 menos que en todo el 2021, y el balance final de 2022 apunta a un récord de novaciones en Gipuzkoa desde 2015.