Vacaciones: trucos para gastar menos

La pandemia ya está, afortunadamente, en fase de declive. El ritmo de vacunación avanza de forma inexorable y los casos de contagiados descienden. Las restricciones se van poco a poco levantando y la población ya tiene ganas de pasar páginas después de año y medio de sufrimiento. ¿Cuál es una de las recetas más eficaces para desconectar? Las vacaciones. Y ahora que llegan los dos meses del calendario por antonomasia para huir de la rutina, julio y agosto, es un buen momento para enviar varios mensajes. Por un lado, que es evidente que hay que disfrutar cada uno en la medida de sus posibilidades. Por otro lado, nunca está de más tener en cuenta unas pautas para no agujerear en exceso el bolsillo. Desde la Organización de Consumidores y Usuarios han elaborado para DV un decálogo con el objetivo de saber cómo gastar menos en vacaciones.

Con al menos dos o tres meses de antelación es posible conseguir algún descuento. Eso sí, en el caso de que tenga pensado alquilar un coche, no espere, ya que este año la oferta es mucho menor de lo habitual y podría quedarse sin él.

En absoluto. Si es flexible con el destino pueden encontrarse ofertas muy interesantes, incluso para viajar fuera de España. Eso sí, recuerde que, salvo que ya esté vacunado y vaya a viajar a un país de la Unión Europea, un viaje al extranjero implicará la realización (y el pago) de dos pruebas PCR.

Si la cancelación se produce con motivo del coronavirus, será siempre gratuita. En cualquier caso, nosotros recomendamos siempre reservar con la opción de cancelación gratuita o flexibilidad para cancelar. Así se evitarán luego demoras en el reembolso.

Sí, conviene consultar en diferentes plataformas de viajes, además de la propia web del hotel o de la aerolínea si va a contratar alguno de estos servicios. Por cierto, en el caso de contratar un hotel, asegúrese de la orientación de la habitación. Las principales diferencias de precio pueden depender de esta variable.

Por precio, sin duda. Pero cuidado con los precios 'chollo', pueden ocultar una estafa. Antes de pagar, asegúrese de que la vivienda es real y el propietario es quien dice ser: pregúntele por los servicios concretos de la zona para asegurarse.

La mejor opción es con las ofertas de última hora. Pero se arriesga a quedarse en tierra, claro.

La pandemia ha llevado a muchas agencias a vender parte de su flota, lo que ha disminuido la oferta y aumentado los precios de forma muy significativa. Por eso, este año el transporte público debería ser una opción a valorar.

Valore la opción de lavar parte de la ropa en el destino para volver a usarla, o llevar toalla de microfibra, más pequeña. Aunque lo que más ocupa en la maleta suele ser el calzado y el abrigo. En cualquier caso, revise el tamaño máximo del equipaje de mano que se permite llevar en cabina, porque algunas aerolíneas 'low cost' han reducido las dimensiones.

Si se alquiló un apartamento, cocinar en él productos de temporada. Y preguntar a los residentes en la zona por los sitios más baratos para comer y hacer la compra. Tampoco es mala idea llevar siempre una botella de agua, que se puede volver rellenar en un bar o en una fuente.

Existen todo tipo de aplicaciones de ahorro para el móvil que se pueden aprovechar también durante las vacaciones. Para buscar ofertas de restaurantes en la zona, para compartir coche en un viaje o incluso para hacer la compra, como OCU Market.

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