Arantxa Tapia pone el foco en las pymes y las renovables

El departamento de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente del Gobierno Vasco gestionará 849,8 millones de euros en 2023, un 9,3% más (73 millones adicionales), según avanzó hoy su responsable, Arantxa Tapia, durante su comparecencia ante el Parlamento de Vitoria para explicar las cuentas del próximo ejercicio. Las renovables, que sigue siendo una «asignatura pendiente» para Euskadi, reconoció, y sobre todo las pequeñas y medianas empresas serán algunos de los focos principales de atención de la consejería.

Así, apuntó Tapia, su gabinete aprobará un Plan de Ayudas a Pymes, con 66 programas, dotado de 544 millones de euros «para mejorar la competitividad empresarial y promover nuevas inversiones». El Ente Vasco de la Energía (EVE), por su parte, contará con 147,2 millones al incrementar su participación en proyectos de energías limpias, al tiempo que recoge tres nuevos programas de eficiencia en el turismo, auditorías energéticas para pymes y un Renove ventanas de 2,5 millones.

El organismo presidido por Iñigo Ansola participará en proyectos energéticos de vanguardia por un importe de 33 millones, de los que, por ejemplo, 20 serán para desarrollar parques solares y algo más de 2,5 para instalaciones de energía eólica, todos en colaboración con terceros. El hidrógeno, en el que hay puestas enormes esperanzas, se llevará seis millones.

Junto a esto, dijo Tapia, el Gobierno quiere dar «un nuevo impulso a la estrategia Basque Talent», mientras la formación y la capacitación de personas se ven reflejadas en las becas de internacionalización, doctorandos en la industria y en el ámbito de la alimentación. Ese programa de formación, capacitación y atracción del talento tiene asignada una partida total de 18 millones de euros.

La viceconsejería de Tecnología, Innovación y Transformación Digital concentra el mayor presupuesto del departamento, con 292.2 millones, seguido de la viceconsejería de Industria (con 227), la de Agricultura, Pesca y Política Alimentaria (212.4) y la de Sostenibilidad Ambiental, con un presupuesto de 103.7 que, por otra parte, es el que más crece, con un incremento del 16,2% respecto al año pasado.

Tapia insistió en que el 'leit motiv' de su departamento «sigue siendo el de acelerar la reactivación económica generadora de empleo, asumiendo las transformaciones digital, energético-climática y sociosanitaria como oportunidades para fortalecer la competitividad de la estructura productiva». «Integrar los criterios medioambientales en todas las políticas sectoriales, no como un condicionante, sino como un factor competitivo para crear valor», añadió, será otra de las prioridades .

El nuevo Plan de Ayudas a Pymes 2023 estará compuesto por 66 subprogramas dotados con 544 millones. Las líneas principales de esta apuesta serán las dirigidas a potenciar la I+D+i, la transformación digital, el emprendimiento, el desarrollo industrial, la energía, el primer sector agroganadero y pesquero, la industria alimentaria, las ayudas a proyectos ambientales y el fomento de la economía circular y la bioeconomía.

La política de I+D+i, adicional a los programas de ayudas para empresas, recoge por primera vez partidas con 'nombre y apellido' para proyectos transformadores y de futuro. Se trata, por ejemplo, de los 14 millones del Basquevolt, el futuro centro para la generación de baterías de litio de estado sólido; o del millón de euros contemplado para el CAM Lab (un laboratorio de pruebas en condiciones reales) del vehículo autónomo y conectado. El Laudio Glass Hub se llevará 2,1 millones para proyectos piloto que promuevan la descarbonización industrial y las inversiones necesarias para cambiar el mix energético.

Teniendo en cuenta el reto demográfico y la falta de profesionales, afirmó la consejera, y en el ámbito de la innovación y el emprendimiento, «desde el departamento se da un nuevo impulso a la estrategia para la atracción del talento bajo el nombre Basque Talent», para la que se habilitan 565.000 euros. Ese dinero servirá para suscribir un convenio y establecer las vías de coordinación del proyecto 'Bizkaia Talent' con otros instrumentos existentes, como 'Gipuzkoa Talent', siendo, eso sí, la versión vizcaína «la herramienta sobre la cual se trabaje para configurar un sistema articulado de generación, fidelización y atracción de talento en Euskadi».

La apuesta por el capital humano, la formación y la capacitación se ve reflejada en los ámbitos de la industria y la tecnología con el programa Bikaintek (5,6M) para la contratación de doctorandos/as; programa de apoyo a competencias digitales (1,5M); las becas de internacionalización Beint (4,5M) y Global Training (3,9M); el programa Itsasoratu para la incorporación de jóvenes a la mar (0,1M); y las Becas doctorandos y tecnólogos/as en el ámbito de la alimentación (1,9M).

La descarbonización de la industria protagonizará ahora un reconvertido programa Bilakatu, nacido en el marco temporal del covid y de la guerra de Ucrania y enfocado en su día al reshoring y a la diversificación, que ahora perseguirá ese reto, con una partida de 15 millones. Partida concebida para «inversiones y procesos que contribuyan a la descarbonización de la industria». Se trata, matizó Tapia, de un programa «sometido a contraste en Europa y a falta de su autorización».

Asimismo, se reeditan los programas de desarrollo industrial Indartu (12 millones para zonas desfavorecidas); Gauzatu (28 de créditos reintegrables); Renove Industria 4.0 (5 millones); Bideratu Berria (un millón para empresas en crisis); y Lortu, con 500.000 euros para gestión financiera.

La política internacional se dota de 26 millones de presupuesto, de los que 10,9 serán para la red exterior. Un corpus de filiales de BTI a la que se sumará una nueva oficina en Quebec (Canadá) y se consolidará la oficina comercial de Turquía.

Según explicó Tapia, se mantienen los programas al acompañamiento internacional de las empresas, con un total de 14,1 millones, repartidos entre los destinados a la intensificación de exportaciones, la exploración de mercados y la colaboración empresarial de acciones en el exterior.

Asimismo, se mantienen las sendas convocatorias de becas de internacionalización Beint y Global Training por importe de 4,5 y 3,9 millones, respectivamente.

El presupuesto para la inversión y la promoción en el ámbito de la industria alimentaria se ve reforzado con claro reflejo en dos de sus programas: Lehiatu Berria, con 16 millones, y OCM Vinos, con 20, destinados ambos a la inversión y la promoción del vino. Asimismo, se destinan 11 millones de euros a la I+D+i en este ámbito a través de las becas a doctorandos (1,9 millones); el programa Berriker de I+D (3,2); las ayudas a la cooperación (1 millón) y las ayudas a la bioeconomía (2,9) y la digitalización (2).

La disponibilidad de fondos europeos para la recuperación ambiental, explicó la consejera, permitirá prever 15,4 millones de presupuesto, con actuaciones para la restauración y la conectividad. Entre ellas, Urdaibai se llevará 5,3 millones, mientras Txingudi captará 3,2 para la conexión ciclista y peatonal Pierre Lotti y la restauración de las Islas Bidasoa.

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