Los pagos con tarjeta suben en verano un 11,5% entre los vascos, pero con un gasto medio menor

Las operaciones en las que se sacó la tarjeta, el móvil o el reloj inteligente para pagar por parte de clientes de Kutxabank ha subido un 11,3% este verano frente al mismo periodo del año pasado. Con el periodo estival llegando a su fin, esta vía se ha empleado en 30,9 millones de ocasiones hasta sumar un consumo total de 1.099 millones de euros, y arroja un incremento similar (11,5%) al número de operaciones.

Casi la mitad de las veces que un vasco ha sacado la tarjeta para pagar –el 42,3%– ha sido para gastar en el comercio minorista y mayorista, y al que se dedicó entre julio y agosto un total de 475,9 millones de euros, un 5,4% más que en el año pasado y el sector con un mayor importe en pagos. Los restaurantes siguen creciendo y ocupan el segundo lugar en número de operaciones al subir un 16,6%, así como el importe pagado en este sector (131 millones), con un alza del 9,7%.

Si atendemos ahora al ticket medio de compra en verano, se produce una curiosa paradoja en el consumo vasco. Mientras el importe medio se ha mantenido prácticamente igual respecto a los meses de julio y agosto de 2023, con un tímido incremento del 0,2%, los seis principales sectores de actividad arrojan un descenso de entre el 1,5 y el 11,1%, siendo el 'resto de ocio' y 'hoteles' donde más baja el gasto medio. Así, el desembolso en hostelería ha pasado de los 25,7 euros del verano pasado a los 24,2 del actual. En el comercio, éste ha pasado de los 37,3 euros de 2023 a los 36,3 de julio y agosto de este presente ejercicio. Expertos consultados por este periódico advierten de que esta situación puede deberse a que, a pesar de que el número de operaciones y los pagos han subido, el consumidor ha mirado más el bolsillo a la hora de hacer un desembolso, amén de una bajada de precios que se lleva produciendo desde inicios de año, lo que también ha provocado que el ticket medio arroje una curva descendente en todos los sectores de actividad.

Los datos ofrecidos por Kutxabank también recogen un apartado 'otros', en el que se agrupan un sinfín de compras realizadas con tarjeta que no están asociadas a un solo sector, y que registra alzas considerables tanto en el número de operaciones, importe y ticket medio, llevando por ejemplo al gasto medio total vasco a quedarse en un crecimiento casi nulo gracias al alza de este apartado, mientras que el del resto de sectores sí es negativo.

Bajamos ahora a pie de calle para pulsar la opinión de diferentes sectores. Desde Hostelería Gipuzkoa –un sector que representa el 11% del gasto de la renta disponible de las familias vascas, por debajo de vivienda (35%) y compra de alimentos y bebidas no alcohólicas 16%), pero encima del transporte (9-10%)–, su secretario general, Kino Martínez, sostiene que el número de comensales y clientes, y también del ticket medio, ha descendido este verano en nuestro territorio. «El consumo local se ha resentido durante este verano. Se ha notado una menor presencia de gente en la calle y un menor gasto en cada momento de consumo, bajando el ticket medio. Esta reducción puede deberse a una contracción del poder adquisitivo de las familias o a unos tipos de interés en máximos que han reducido la capacidad de gasto en nuestro sector antes que en otros como la sanidad, educación, ropa y calzado...».

Una reciente consulta realizada a alrededor de 40 directores de las asociaciones provinciales de Hosteleria del Estado (en la que también se encuentra la guipuzcoana) sobre la marcha del verano también confirma esta tesis.Así, la valoración general de la temporada de verano respecto al año anterior ha sido peor para el 46,8% de los hosteleros encuestados, frente a un 23,6% que cree que ha sido mejor y un 29,5% que ha respondido que ha sido igual. La facturación, por su parte, ha sido entre un 5-10% menor para el 28,6% de los hosteleros encuestados, frente a solo un 13,2% que considera que ha sido mayor.

Si ponemos ahora el foco en qué cambios ha notado el sector hostelero en el comportamiento del consumidor, el 44,5% estima que las visitas han bajado, frente a un 20,9% que cree que han subido. Por último, la variable que arroja mayor unanimidad en sus respuestas es la del gasto. Y es que el 57,7% de los encuestados considera que el consumo de los clientes ha bajado, mientras que solo un 12,7% cree que ha subido.

Otro fiel indicador que demuestra cómo el consumo se ha retraído durante el periodo estival son los pedidos realizados a los grandes proveedores del sector (refrescos, vino, cerveza, etc.). Martínez sostiene que en una encuesta realizada a 15 de julio, estos proveedores habían constatado «una caída de volumen en litros de entre el 4 y el 10% respecto al año pasado».

Antton Otaegui lleva la gerencia del restaurante Kaskazuri situado en el céntrico Paseo Salamanca de la Parte Vieja, y del Muxumartin, en la calle Puerto. Otaegui sostiene que «en el Kaskazuri hemos trabajado menos este verano, en torno a un 10% menos. En meses de agosto y julio de otros años llenábamos el local todos los días, mientras que este verano hemos llenado, pero justito, con alguna mesa libre de vez en cuando, mientras que otros años teníamos clientes esperando en la puerta.En septiembre también hemos notado cierto bajón, cuando otros años parecía que el verano se estiraba un poco más. En Muxumartin, en cambio, la afluencia ha sido algo mejor porque hemos mejorado respecto al año anterior y además hemos ganado algún premio en los últimos meses.No obstante, en líneas generales, sí es verdad que muchos hosteleros de la Parte Vieja hemos visto mucha menos gente este verano en las calles».

La Federación Mercantil de Gipuzkoa, que representa a más de 1.700 puntos de venta en el territorio, constata también como el consumo ha caído durante el periodo estival tras realizar una encuesta a sus asociados. «Existe muy poca correspondencia entre el número de turistas y el gasto real en el comercio local.Han disminuido las ventas de forma importante. Más de la mitad de los encuestados así lo corroboran. El ticket medio se ha mantenido o ha bajado», asegura la nueva presidenta de la Federación Mercantil, Estíbaliz Tello.

Las razones que explican esta caída en el consumo del comercio local son estructurales. «Familias y particulares han tenido que hacer frente a lo largo del último año a una subida de sus cuotas hipotecarias, así como el incremento en la cesta de la compra, por lo que el margen que les quedaba para gastar durante sus vacaciones en nuestros negocios ha sido muy pequeño». Tello sí pone en valor el consumo de la 'silver economy', aquellas personas de más de 50 años. «Tienen mucho criterio y apuestan por la cercanía.Valoran mucho que las tiendas de toda la vida sigan abiertas».

Hostelería y comercio también encuentran otro factor coyuntural que explica la bajada del consumo vasco: el mal tiempo. «En un momento en el que el gasto ha bajado, necesitábamos que todo sumase a favor, y la climatología no nos ha ayudado», sostiene Tello. «La mala climatología también nos ha afectado este verano. Con lluvia, o sin tanto sol, el turista se queda en casa, en el hotel o decide hacer alguna actividad bajo techo», concluye Martínez.

Los datos estatales, como también ocurre en Euskadi, volvieron a crecer con fuerza en agosto. El monitor de consumo de Caixabank constata que el gasto subió un 4,7% en el octavo mes del año en su comparativa interanual. El ocio y la hostelería fueron los sectores donde más creció el desembolso (7,7%), con la restauración liderando la clasificación (11%), seguido de cultura y espectáculos (8%). El consumo en el comercio minorista subió un tímido 1,8%.