«La fortaleza emocional y el aprendizaje continuo van a ser claves en el futuro»

– ¿Qué hará falta para brillar en el trabajo en el futuro?

– Necesitamos adaptar nuestras competencias de una forma más rápida. Va a hacer falta una mayor capacidad de adaptación y flexibilidad. Pero también mucha curiosidad y un aprendizaje continuo. No sólo a nivel tecnológico, sino en muchos aspectos más. Por ejemplo, será indispensable esa curiosidad constante por adquirir nuevos conocimientos y estar conectado al mercado para adelantarnos a lo que nos trae el futuro.

– ¿Y qué consecuencias tendrá este esfuerzo a nivel humano?

– Requerirá mucha fortaleza emocional para mantenernos activos en este modelo de aprendizaje. La transformación requiere nuevos conocimientos y experiencias. Y una gran resiliencia.

– ¿El foco seguirá estando en las personas o en las máquinas?

– Según avanzan las tecnologías, los seres humanos somos más importantes. Tenemos mucho que aportar todavía. Tenemos muchas herramientas para aprender, pero necesitamos potenciar la inteligencia colectiva, y cambiar de chip hacia una actitud de aprendizaje a lo largo de la vida: 'life long learning' colectivo.

– ¿Cómo afrontan las empresas este escenario?

– Este 'supercambio' les ha dado la oportunidad de transformarse digitalmente de golpe. Hemos aprendido muchísimo y las que se han mantenido se han hecho más fuertes. Y luego está la innovación. Cómo reaccionamos para buscar soluciones: nuevas formas de negocio, nuevos productos... gente creativa que se ha reinventado.