Danobatgroup sortea la incertidumbre con un récord de facturación de 344 millones

Unos números que revelan la robustez de una de las grandes firmas de nuestro territorio, que le consolidan en el liderazgo de su sector y que lo hacen además en un momento de incertidumbre, con la economía europea emitiendo señales de desaceleración y un escenario geopolítico endiablado con más inestabilidades que certidumbres.

En este contexto, la directora general de Danobatgroup, Nerea Aranguren, expuso este martes en el cuartel general de Elgoibar –tienen catorce plantas en total, algunas en el extranjero como en Países Bajos, Alemania o Estados Unidos y otras dos en Bergara e Itziar– el camino recorrido y también las perspectivas de futuro. El mensaje fue claro: «Esperamos un mantenimiento del negocio, ya que venimos de años muy fuertes. A lo largo del plan estratégico 2025-2028 no se prevé un crecimiento excesivo, más bien de en torno a un 5% en los próximos años». Con todo, el 90% de la cartera de pedidos para 2025 ya está asegurada.

La contención en los pronósticos está más bien relacionada con el registro un año tras otro de hitos, que dificultan la consecución de uno nuevo. El comportamiento de algunos de sus clientes más importantes, más bien a la baja como es el caso de Alemania y China, está detrás también de esas cifras. Por el contrario, Estados Unidos, Italia y Francia experimentaron crecimientos del 15,4, 7,9 y 5%, respectivamente. Tampoco facilita las cosas el «momento delicado» que vive la máquina-herramienta en España y en Europa. Danobatgroup, eso sí, confía en que las ventas alcancen los 400 millones en 2028, un 16% más. En este periodo, las inversiones rondarán los 40 millones, la mitad de la realizada en los últimos cuatro años.

«Las inversiones de 80 millones ya materializadas nos han puesto en una posición óptima y no necesitamos grandes desembolsos adicionales en el actual ciclo de incertidumbre», comentó la ejecutiva. Un esfuerzo financiero centrado en «mejorar» las infraestructuras y capacidades de Danobat, Soraluce y Goimek. Ésta último, por cierto, inaugurará una nueva planta en Itziar en el mes de junio.

En cuanto al empleo, en cambio, la cooperativa guipuzcoana prevé contratar a «70 personas» en cuatro años, a los que se sumarán otras 80 por relevo generacional. «Entre 120-130 personas en total», agregó Aranguren. No hay que olvidar que el conglomerado industrial emplea a 1.459 personas, 1.032 de ellas en Euskadi con un 15% de presencia femenina en su conjunto.

Aranguren, preguntada por el impacto que la política proteccionista de Donald Trump puede tener en la actividad de la compañía, contestó que hay que tener «calma» y que aún es «pronto» para extraer conclusiones. También advirtió que la incertidumbre paraliza la inversión, y que los bienes de equipo –principal destino de la máquina-herramienta– son los que primero sufren parones de este tipo.

Sobre la automoción, uno de los cinco grandes sectores en los que opera la cooperativa –supone más del 6% de la producción–, afirmó que se halla «nervioso» debido a varios factores como la incertidumbre en torno al coche eléctrico, y reconoció que especialmente en Europa «no está en su mejor momento».