El Gobierno Vasco hace una valoración agridulce del acuerdo arancelario y muestra su preocupación por el 50% al acero

Eso sí, apunta que desde el Gobierno Vasco hacemos una «valoración agridulce». Por el lado positivo, apunta que «es mejor un acuerdo arancelario que una guerra comercial» y espera que este pacto «cierre un ciclo de incertidumbre comercial que daña a las inversiones a futuro de nuestra industria». Asimismo, muestra su satisfacción por la reducción del 25% al 15% del arancel al sector de automoción, «un sector –remarca– que es clave en Euskadi ya que emplea a cerca de 40.000 personas».

Sin embargo, ve con «preocupación el establecimiento de aranceles permanentes que penalizan a una economía netamente exportadora como la nuestra y que se mantengan los aranceles al acero y aluminio al 50%, lo que daña a un sector estratégico como el de la siderurgia vasca».

Añade que en Euskadi «estamos preparados para defender nuestro tejido industrial y actuar para apoyar a los sectores más afectados» y que en las próximas semanas van a activar mesas sectoriales para analizar el impacto directo e indirecto de este acuerdo comercial y decidir si tenemos que activas nuevas medidas de apoyo».

Recuerda que las exportaciones vascas a los EE UU se acercan a los 2.000 millones de euros al año y que ya están en marcha todas las ayudas anunciadas en abril por una cuantía de 2.150 millones de euros dirigidas a la financiación de las empresas más impactadas, a la innovación y diferenciación de productos y a la búsqueda de nuevos mercados para nuestras exportaciones.

El Departamento de Industria insiste en que «tomando como base la colaboración público-privada y el nuevo Plan de Industria, seguiremos activando y alineando todas las capacidades de Euskadi, a impulsar la transformación de nuestro tejido tecnológico-industrial para ganar en competitividad y a garantizar el empleo de calidad para nuestras hijas e hijos».