Gipuzkoa perdió el año pasado 385 comercios
La compra por internet, la falta de relevo generacional y el cambio de cosutmbres son alguna de las razones que explican el cierre de estos negocios, según Euskomer
Malos tiempos para el comercio guipuzcoano. Es una de las conclusiones que se desprenden del análisis realizado esta mañana por Euskomer, la confederación vasca del ... comercio. Aunque los negocios minoristas cerraron 2023 con un avance en sus ventas del 0,2% en nuestro territorio y de un 2% en Bizkaia, frente a un retroceso del 1,3% en Álava, las sensaciones son muy negativas y preocupantes.
La compra y venta de productos por internet, el cambio de costumbres, la falta de relevo generacional y los elevados intereses son las principales razones del cierre de 385 establecimientos el año pasado en Gipuzkoa, para arrojar un total de 11.793 negocios en el territorio. En el último lustro, Gipuzkoa ha perdido además un 5% de comercios al pasar de 12.413 a los actuales 11.793. Si ampliamos el mapa al conjunto de Euskadi, el País Vasco cerró 2023 con el mantenimiento de 34.885 tiendas frente a las 34.963 existentes en 2022, lo que supone una caída del 3,08%. Bizkaia soporta el 52,82% del pilar comercial vasco con 18.410 negocios, frente a los 11.793 censados en Gipuzkoa y los 4.652 (13,35%) operativos en Álava.
Sin embargo, la densidad comercial está bajando «a un gran ritmo» en los tres territorios, contribuyendo al deterioro del entorno urbano, «creando una sensación de abandono y desolación», han lamentado responsables de Euskomer, que representa a 31.700 empresas y personas autónomas. «Muchos de los locales que cierran ya no vuelven a subir la persiana», subrayan.
Desde los ayuntamientos y otras instituciones se están impulsando distintas medidas para paliar la situación. En Gipuzkoa, por ejemplo, el consistorio de Errenteria ha decidido destinar 90.000 euros más a las ayudas para la movilización de locales vacíos para dar respuesta a la demanda, y el de Beasain concede subvenciones para la adquisición o alquiler de locales ya clausurados. Andoain, por su parte, ha anunciado a comienzos de año que facilitará la conversión de locales vacíos en viviendas.
Existe otra gran preocupación en el comercio de Euskadi por la entrada de zonas de bajas emisiones (ZBE) de las grandes ciudadades vascas. Euskomer advierte que esta medida afectará negativamente en el flujo de clientes y la capacidad de los comercios para recibir entregas, además de suponer «costes adicionales» para los negocios, al verse obligados a realizar inversiones para cumplir con los estándares de emisiones.
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