Confebask estima que el coronavirus restará alguna décima a la economía vasca

El presidente de Confebask, Eduardo Zubiaurre, ha dejado claro que hacer predicciones económicas es más difícil que nunca debido a la «altísima incertidumbre que existe por la evolución del coronavirus». Con todo, y con los datos que hay disponibles en la actualidad, se decanta por ahora por el escenario menos grave, con efectos que incidirán sobre todo en este primer trimestre, y que se traducirán en una desaceleración económica suave pero no en una recesión. De este modo, Zubiaurre ha considerado que puede restar alguna décima a las previsiones de crecimiento de este año realizadas por Confebask, y que son del 1,9%. Un crecimiento que permitirá, ha dicho, seguir creando empleo.

El presidente de los empresarios vascos ha participado esta mañana en un encuentro organizado por Deusto Business Alumni en San Sebastián, que ha reunido a un nutrido grupo de empresarios y agentes económicos. Zubiaurre ha dejado claro, eso sí, que es muy difícil predecir la evolución del coronavirus. «Espero que se solucione pronto», ha remarcado.

El presidente de Confebask ha indicado que ha sorprendido la rapidez con la que se ha extendido la amenaza sanitaria y también el impacto sobre el tejido productivo. Así, ha recordado que los sectores más vulnerables en Euskadi son primero las empresas muy tecnológicas y después la industria manufacturera por la falta de suministros. Aunque ha indicado que «de momento hay preocupación entre los asociados pero no una afección real». En este sentido, y a preguntas de los asistentes, ha señalado que no le consta por ahora que alguna empresa haya solicitado un ERE temporal en Euskadi, como lo ha hecho Volkswagen Navarra.

Eso sí, Zubiaurre ha apelado a la responsabilidad de todos los agentes, incluida la Administración, y ha reclamado no caer en la histeria. En este sentido, considera que el teletrabajo no es una solución real para muchas empresas. «No sé cómo convive esa medida con CAF», ha remarcado aprovechando que el presidente de la empresa beasaindarra estaba entre los asistentes. «Es una medida que hay que poner en cuarentena», ha remarcado.

Y en línea con lo señalado esta semana por el presidente de Cebek, ha reclamado que todo el peso de las medidas que se tengan que adoptar no caigan sobre la empresa, en relación a las posibles bajas laborales que se puedan producir si los trabajadores tienen que estar en cuarentena, porque ello supondría un «sobrecoste muy importante».

El presidente de Confebask ha indicado que esta amenaza pasará y el próximo año las empresas tendrán que abordar de nuevo los retos ineludibles que tienen sobre la mesa. Entre ellos, ha destacado cuatro: competir en un mundo globalizado, la transición industrial hacia la industria 4.0, la transición demográfica y la ecológica. En lo que respecta a la transición demográfica y el reto de la atracción del talento, ha destacado que crece la preocupación de las empresas sobrepasando ya el 70% de las que lo aluden como principal problema.

Ha advertido sobre el impacto de una posible subida de cotizaciones sobre la competitividad de las empresas y ha opinado que las cuotas femeninas son necesarias pero no suficientes.