Peio Etxeberria y Julen Martija no se rinden así como así

En el frontón Daniel Huarte perdieron quince pelotas entre ambos: ocho el delantero y siete el zaguero, incluido un resto de zurda del ataundarra que no alcanzó el frontis. Si ahorras a los contrarios casi el setenta por ciento del trabajo necesario para llegar a veintidós, solo un milagro puede conducirte a la victoria.

Además, Jon Ander Peña no encontró la fórmula para obtener mayor renta del dominio ejercido por Albisu en la zaga para rematar y hacer crecer el casillero colorado. Gozó de derecha el ataundarra. Cobró cuatro tantos de cosecha propia... y acabó tan fallón como su compañero.

Una actuación seria bastó a Peio Etxeberria y Julen Martija para reengancharse al Campeonato y mantener vivas de momento sus opciones de colarse en el playoff. Llegaron a Hendaia bajo la amenaza de una derrota que les condenaba a la eliminación. Volvieron a sus casas con el segundo punto en el bolsillo, a uno de las dos duplas que les preceden en la clasificación y con el tanteo particular a su favor en caso de terminar la primera fase empatados con Peña y Albisu. Les ganaron 12-22 y habían caído 22-14 en la primera vuelta. Seguro que Altuna III y Aranguren no lloraron con el desenlace, que alivia en parte sus problemas a falta de cumplir con sus propios trabajos.

Destacó Martija, sobre todo en tareas defensivas, lo mismo desde las cercanías del rebote que a la hora de cubrir el txoko. Su alcanzada del 6-12 cortó la primera señal de reacción de los Jon Ander después de verse once tantos por detrás 2-11 al poco de empezar. También buscó el de Etxeberri arrimar a la pared izquierda.

Sin brillo y también con menos oportunidades de remate que su rival de posición, Peio Etxeberria trabajó, ayudó en la medida de lo posible a Martija y mantuvo el tipo. Esta vez bastaba con estar en el sitio, defender su área de actuación y esperar el fallo de los contrarios.