Altuna III, temple en el horno del Labrit
Supera a un Artola fallón con aplomo, defensa y menos remates que en partidos anteriores
Jokin Altuna alcanzó el perseguido Torneo San Femín del cuatro y medio al tercer intento consecutivo. Había perdido las dos finales anteriores, la ... de 2017 frente a Olaizola II y la de 2018 contra Bengoetxea VI. Este domingo no dejó escapar la oportunidad ante Iñaki Artola, otro guipuzcoano, en un Labrit de Pamplona lleno con 1.200 espectadores que ansiaban mayor equilibrio e incertidumbre. Hubo pelea, tantos duros e intensos. Faltó emoción. Altuna III se encargó de anularla desde que una tacada de nueve tantos le permitió neutralizar primero un 1-3 en contra y adquirir a continuación una ventaja de siete, 10-3, que administró sin aprietos hasta el definitivo 22-13, tras el que regaló la camiseta del partido a un seguidor. La guardará a buen recaudo. Seguro.
«Estoy haciendo daño porque no despliego el mismo tipo de juego en todos los tantos», explicó Jokin Altuna tras la victoria. «A veces voy en busca del aire, otras me quedó más atrás a bote... Además, cuando empecé de profesional no podía jugar de tú a tú físicamente contra pelotaris de este tipo. Ahora, en cambio, sí. Y salto a la cancha con esa tranquilidad».
El Labrit volvió a ser un horno a alta temperatura en el que el delantero amezketarra demostró temple. De principio a fin. No fue una ocurrencia que se adelantara a restar de aire el primer saque de Artola.»En los partidos anteriores Iñaki había sacado una barbaridad y quería cortar eso. No sé si ha sido por esa acción, pero esta vez sus saques han sido con más pared y menos arrimados». También demostró control de la situación cuando su oponente recurrió en el 15-7 a su tercer descanso, el último que le reserva el reglamento. Lo aprovechó Altuna III para permanecer sentado en la silla más tiempo que el rival.
Altuna III
22
-
13
Artola
-
Tiempo de juego 53 minutos y 13 segundos
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Pelotazos a buena 263
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Tantos de saque Altuna III, 2. Artola, 4
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Faltas de saque Altuna III, 0. Artola, 1.
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Pasas del cuatro y medio Altuna III, 0. Artola, 0
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Tantos en juego Altuna III, 10. Artola, 5
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Tantos perdidos Altuna III, 4. Artola, 9
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Marcador 1-0, 1-3, 10-3, 10-5, 12-5, 12-6, 13-6, 13-7, 16-7, 16-10, 20-10, 20-13 y 22-13.
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Tantos de diez o más pelotazos Doce, siete para Altuna III y cinco para Artola.
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Momios de salida 100 a 50 a favor de Altuna III. 30 a 100 por abajo
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Telonero Peio Etxeberria y Tolosa, superiores cada uno en su posición, rompen el partido a partir del 9-9 para imponerse 16-22 a Arteaga II y Larunbe.
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Incidencias llenazo en el Labrit de Pamplona. Hacía días que se habían agotado las localidades. 1.200 espectadores. Los paseos, repletos. Hubo reventa. Temperatura alta.
Coger el centro de la cancha y mover la pelota a las esquinas es fundamental dentro del cuatro y medio. También es la manera de neutralizar la potencia de Artola. «Creo que he hecho un partido completo», confesó Altuna. «Artola apenas deja pelota servida y quizá por ello he cobrado menos remates que otros días. A Iñaki le ha costado dominar y creo que ha sido una de las claves de la final. Yo tenía que atacar y cruzarle la pelota a la pared para evitar su dominio. Esa era mi idea». La materializó.
Funcionó la reventa, con las canchas a 100 euros
El temor a la reventa tomó cuerpo ayer a las puertas del Labrit. La medida por la que las reservas a través de internet son como máximo de paquetes de diez localidades no es suficiente para evitarlo. Un pelotazale que había llegado a Pamplona sin entrada para la final pagó 100 euros por una cancha que en realidad costaba 50. El doble del precio real. Mientras funcionaba la reventa, clientes habituales de la mano profesional debieron conformarse con ver el Altuna III-Artola a través de la televisión ante la imposibilidad de adquirirlas a través de reservas. Hacía un buen número de días que se habían agotado las de asiento. Ni siquiera quedaban paseos.
El propio Artola reconoció tener claro que «para ganar necesitaba rendir al cien por cien. Hay fallos que quizás no pagas tan caro contra otros, pero frente a Jokin sí. Algunos han sido porque me obligaba». Se lamentó, sin embargo, de «varios errores en pelotas a placer, con todo el frontón para mí. Me voy a casa con la sensación de haber hecho tres o cuatro regalos claros. Por contra, sacando y restando me he encontrado bastante bien». Perdió diez tantos, incluida la falta de saque del 17-10, a renglón seguido de dos tantos firmados con el primer disparo. En ese momento el amezketarra se sentía «más cansado. He fallado esos dos restos. Hemos jugado muchos tantos duros». Doce alcanzaron o rebasaron la decena de pelotazos.
«Bendito problema ganar al tercer intento; jugar tres finales ya es todo un éxito»
Jokin Altuna, Delantero de Aspe
«No sé si hoy es el díapara extraer conclusiones del torneo, sigo dando vueltas a la final»
Iñaki Artola, Delantero de Baiko
No hay partido en el que Altuna III no deje alguna joya. La de ayer, en el 12-5, llegó en una cortada de zurda desde el cinco tras recular porque la pelota le atropellaba. Ahora bien, castigó más con las cortadas de derecha, incluidas varias de sotamano que le valieron para recoger la pelota hacia la pared izquierda tras obligar a Artola en el ancho.
Altuna III atraviesa un gran momento de forma que ha encontrado recompensa en una txapela, la primera que se cala desde la final del Mamomanista de 2018. Aunque no sea en un campeonato oficial, tiene un valor deportivo significativo ya que llega en una competición en la que han participado las figuras de las dos empresas. Devuelve a lo más alto a este amezketarra de 23 años.
Además, corta de raíz la racha de cinco victorias consecutivas de Asegarce-Baiko en este torneo. El último vencedor de Aspe era Irujo en 2013. Altuna III recoge el testigo de su ídolo.
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