Larrañaga se estrena en la Trinidad
El aizkolari de Azpeitia devuelve a Gipuzkoa la Urrezko Kopa tras imponerse con autoridad a Iker Vicente
San Sebastián
Lunes, 16 de agosto 2021, 06:46
Mikel Larrañaga cogió el testigo de Joxe Mari Olasagasti como ganador guipuzcoano en la Urrezko Kopa de aizkolaris en la Plaza de la Trinidad de ... San Sebastián. Desde 2007 ningún aizkolari del territorio guipuzcoano había ganado la Urrezko Kopa y Larrañaga se estrenó como ganador de uno de los campeonatos más importantes de la aizkora.
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El aizkolari de Azpeitia llevaba años apuntando, pero sin lograr su objetivo de la diana y ayer lo consiguió con brillantez. Era candidato y se impuso al principal favorito, Iker Vicente, con 43 segundos de ventaja. El ganador de las dos últimas ediciones no pudo revalidar el título ante el empuje del azpeitiarra. Vicente comenzó de forma fulgurante el corte de los catorce kanaerdikos, pero en el cuarto tronco Larrañaga se puso en cabeza y no lo abandonó más. Terminó la Urrezko Kopa de 2021 con un tiempo de 31:30 y esta vez pudo aguantar el ritmo endiablado que impuso Vicente en los primeros troncos. En las dos últimas ediciones Larrañaga se había mantenido cerca e incluso por delante del de Otsagabia en parte de las dos ediciones, pero en los últimos kanaerdikos sufría un bajón e Iker Vicente se marchaba por su mejor condición física.
Esta vez ocurrió lo contrario. En los tres primeros troncos era Vicente quien marcaba el ritmo con ventajas de alrededor de 15 segundos, pero en el cuarto kanaerdiko el aizkolari guipuzcoano se puso con seis segundos de ventaja. El ganador terminaba fácil el tronco y cogió confianza con el paso de los minutos. Veía que su ritmo y corte eran buenos y que a su principal rival le costaba seguir su ritmo. Se creció y para el noveno kanaerdiko su ventaja ya era de 43 segundos.
El octavo kanaerdiko, vital
El octavo kanaerdiko fue clave. En la mitad del trabajo la renta de Larrañaga era de 18 segundos, 14 minutos por 14:18 de Vicente, y en ese octavo tronco la renta aumentó hasta los 38 segundos. Veinte segundos más que ya dio más aire al azpeitiarra.
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La máxima ventaja llegó en el decimoprimer kanaerdiko con un minuto y siete segundos de renta, aunque no estaba todo decidido. Larrañaga ya ha sufrido en los últimos troncos, incluso en el último algún disgusto que le ha llevado a perder campeonatos importantes, pero esta vez lo tenía más controlado.
Vicente apretó en el penúltimo kanaerdiko para situarse a 40 segundos, pero ya era demasiado tarde. En el último kanaerdiko el triunfo de Larrañaga ya era claro y pudo gozar una victoria que le supo a gloria.
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Otañi y Atutxa, lejos
El campeonato se centró en los dos principales favoritos y por detrás las posiciones se definieron bastante rápido. Eneko Otaño, que sonaba como candidato terminó tercero a más de tres minutos. Quizás más lejos de lo esperado.
El de Beizama y el de Atutxa se mantuvieron en la pelea hasta el tercer kanaerdiko, pero en el cuarto ambos se descolgaron y perdieron cada vez más tiempo. El campeón de Dima terminó cuarto. Entre el quinto y el sexto tronco perdió comba respecto a Otaño para cerrar su participación en 38 minutos y 21 segundos, muy lejos de sus registros cuando era primero o segundo entre 2013 y 2018. Poco a poco tiene que recuperar sensaciones y estado de forma tras dos años difíciles para él. Jon Rekondo acabó en la última posición. Los aizkolaris notan la inactividad en competiciones y al aizkolari de Leitza le costó mantener un ritmo sostenido.
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«Ir por delante te da otra alegría y eso me ha dado confianza»
Mikel Larrañaga era un hombre feliz nada más terminar la Urrezko Kopa. Reconocía que verse por delante le dio confianza. «Me ha costado coger la marcha, pero luego he ido a más. Me he visto por delante y eso me ha dado una alegría que te llena de fuerza».
El tiempo del ganador fue de 31 minutos y 30 segundos. Una marca habitual en las victorias de la Urrezko Kopa, aunque lejos de la mejor marca de Donato Larretxea. El de Arantza realizó 27:17 en 1995, pero la marca de Larrañaga de ayer es un buen registro. Es un tiempo peor que los logrados por Vicente en 2019 y 2020, pero es mejor que tres de las cuatro victorias de Atutxa entre 2015 y 2018 y no está alejado de los registros que realizaba que se movía entre los 30 minutos altos y 31 cortos.
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