Lucas Mañero: «El camino para llegar arriba algún día es todavía largo»

- ¿Con qué edad comenzó a jugar a pádel?

- Cogí mi primera pala con tres años. Solía ponerme detrás del cristal mientras jugaba mi padre. Y cuando terminaba él, entraba a la pista a darle a la pelota contra la pared.

- ¿Fue él quién le metió el gusanillo en el cuerpo?

- El gusano entero. Desde pequeño me ha acompañado siempre a todos los partidos. Antes me llamaba para jugar con él y ahora es al revés. Participamos juntos en el circuito guipuzcoano. Nos enfadamos en la cancha, pero sin faltarnos al respeto.

- ¿Cuántos copas guarda en casa?

- Cerca de veinte, entre ellos la txapela de campeón de Euskadi de este año. Algunas están en mi habitación y otras, en el trastero. He regalado varias a mis amigos.

- ¿Se acuerda dónde ganó el primero?

- En un club de golf de Bilbao. Tendría nueve años, pero ahora mismo no sé dónde lo tengo.

- ¿Y el último?

- El Campeonato de Europa.

- ¿Con quién formó pareja?

- Con Jaime Uriarte. Llevo todo el año con él. Nos compenetramos bien. Es vizcaíno.

- ¿Dónde se entrena?

- En Donostia, en el BTX de Riberas de Loiola. Al lado de casa.

- ¿Con qué asiduidad?

- Voy cuatro o cinco días a la semana. Suelo hacer hora y media diaria de pista y tres sesiones de físico.

- ¿Quién es su entrenador?

- Ahora mismo no tengo...

- ¿Su mejor partido?

-El último, la final del Europeo de Lisboa. Ganamos a los portugueses en su casa.

- ¿El peor?

- Varios en los que no entraba la bola y me puse muy nervioso.

- ¿Su mejor golpe?

- El smash 3, remate que bota en campo contrario, golpea en la pared lateral, en la del fondo, y termina saliendo de la cancha. Y también la volea de derecha.

- ¿Qué necesita mejorar?

- La defensa, porque mi juego es siempre ofensivo. Me gusta ir mucho al ataque.

- ¿Cómo se asciende en el ranking del World Pádel Tour?

- Ganando partidos y además torneos, tanto del circuito guipuzcoano como del vasco. Parece algo sencillo, pero resulta bastante complicado. Hay que tener la cabeza fría y no perder nunca la concentración.

- ¿A qué jugador le gustaría parecerse?

- A Fernando Belasteguín, el mejor de la historia. Ha sido el número 1 dieciséis años consecutivos. Nadie en el mundo ha conseguido tantos éxitos como él. Además, es una persona muy sencilla. Siempre está dispuesto a sacarse una foto con quien se lo pide.

- ¿Y de otros deportes?

- A Rafa Nadal.

- Los mejores del mundo siguen siendo argentinos.

- Eso era antes. Ahora las cosas están cambiando. En los últimos tres años los mejores son el gaditano Juan Lebrón y el madrileño Alejandro Galán. Existe una gran rivalidad entre España y Argentina. Son los dos países de mayor nivel del mundo.

- ¿Qué diría a la gente para que se anime a jugar a pádel?

- Es un deporte que engancha, fácil de practicar. Con tres amigos puedes pasar una buena tarde. Hace falta constancia si quieres progresar. No vale con jugar un partido de vez en cuando.

- ¿Es un deporte elitista?

- Cada vez menos, aunque ha cargado con ese sambenito. Las malas lenguas decían eso. Antes solo lo practicaban 50 personas en el mundo y ahora está abierto a todos. Pero hay muchas cosas detrás; entrenamiento, esfuerzo, dedicación... Lo que sí es verdad es que es un deporte bastante caro.

- ¿Cuánto de caro?

- Por ejemplo, un bote de tres pelotas cuesta seis euros y pueden durarte un solo partido.

- ¿El precio de una pala?

- Las de nivel, entre 200 y 300 euros. Hay más caras, y también más baratas. Este año he usado entre ocho y nueve. Se desgastan un montón.

- ¿Tiene patrocinador?

- Si, Viral. Me surte de todo lo necesario.