Ampo Ordizia no encuentra la manera de ganar

No comenzaron bien las cosas para el Ordizia. A los seis minutos ya iban por detrás en el marcador tras una patada a palos de Poet (3-0). Jabase, también con el pie, puso el empate acto seguido (3-3) y de nuevo Jabase, con el pie, aventajó a los goierritarras (3-6). Pero llegó la jugada que desniveló el partido por completo. La colegiada del partido, Jenny Lee, mandó a los vestuarios a Saleta por un placaje alto el partido se rompió definitivamente a favor de los sevillanos.

Del Hoyo hizo sangre del árbol caído con otro ensayo que transformó Poet (10-6), pero aún así los ordiziarras no arrojaron la toalla. Es más, se fueron arriba y Lander Mujika posó el oval tras la línea de marca tras encontrar un hueco en la defensa sevilla y Jabase acertó a palos (10-13). El propio Jabase, con otra patada a palos, aumentó la renta para los goierritarras antes del descanso (10-16). El público no daba crédito a lo que estaba viendo sobre el césped. A base de garra y amor propio, el Ordizia estaba dando la sorpresa.

Desgraciadamente, la decoración cambió en la reanudación. Suso Romero, entrenador del Ciencias, reajustó líneas y ordenó a sus jugadores que hurgasen en la herida. Dicho y hecho. Un ensayo de García nada más iniciarse el segundo tiempo que transformó Huber puso de nuevo en franquicia a los andaluces (17-16). Crecido, el Ciencias se hizo con el timón del partido y no tardó demasiado en poner la puntilla gracias a un ensayo de Cuadrado, que aprovechó la fragilidad de la defensa goierritarra para posar el oval por detrás de la línea de marca (24-16).

Aún quedaba tiempo para la remontada y los ordiziarras, pese a las circunstancias, se dejaron la piel en busca de la victoria. Jabase de nuevo dio alas a sus compañeros con una patada a palos (24-19) en el tiempo añadido, pero tres minutos después, en el 85, un ensayo de Camarero acabó por enterrar las opciones guipuzcoanas (29-19). No merecieró la derrota el Ordizia, pero ahora urge ganar cuanto antes. Como sea. El domingo recibe en Altamira a Les Abelles. Sólo vale la victoria, el buen juego queda aparcado para otra ocasión.