Adur Amatriain: «Voy sin presión al circuito 'Challenger' y me puede favorecer»
El zarauztarra ha logrado por primera vez el billete para participar en el circuito mundial del que salen los que ascienden a la primera división
El zarauztarra, de 18 años, ha acabado quinto en el circuito europeo lo que le ha dado el billete para participar por primera vez en ... el 'Challenger Series', las pruebas más selectas en cada continente desde las que se da el salto a la primera división del surf. Amatriain no renuncia a nada: «No voy a parar. Una vez dentro, cualquier cosa puede pasar», advierte quien fuera campeón de Europa júnior la pasada temporada. Le respaldan Hurley, Cabreiroa, Pukas, Yow, Stance y Jam.
– ¿Era un objetivo lograr la clasificación para la 'Challenger Series' o le llega de forma inesperada?
– Siempre lo he tenido en mente, he trabajado para tener la posibilidad pero nunca me he querido presionar más de la cuenta. Empecé el año bastante bien, me di cuenta de que podía luchar por ello, y no dudé sabiendo que el nivel de los surfistas era muy alto.
– ¿Cuándo cambió el chip?
– Arranqué el año con un noveno puesto en Azores, luego estuvimos tres meses sin competir y fue en Israel cuando entendí que podía conseguirlo al acabar en la tercera plaza. Ese campeonato fue clave porque lo tenía que hacer muy mal en Portugal, en las dos últimas pruebas, para quedarme fuera. Por suerte hice un quinto y un noveno en esas dos pruebas en aguas portuguesas, eliminando a algunos de los favoritos por el camino, y logré el billete.
– ¿Y ahora?
– En diez días salgo para Australia donde tenemos dos pruebas. Luego tendremos un pequeño descanso y ya enlazaremos campeonatos en Sudáfrica, California, Portugal, Hossegor, Brasil y Hawai. Prácticamente todas las pruebas se celebran en olas que conozco salvo las de Brasil y Sudáfrica. El problema no es ese sino el alto nivel de los surfistas. Voy a competir con gente que está peleando por lograr la permanencia en el CT (la primera división del surf) y con competidores que llevan años tratando de dar el último paso para ascender. Cada manga va a ser una final.
– ¿Cómo se ve usted en ese escenario?
– Voy sin presión y eso me puede favorecer. Soy un surfista que lo mismo se maneja en olas grandes y potentes que en pequeñas en las que es necesario un mayor repertorio de maniobras. El surf ha cambiado y ahora hace falta volar y planchar los aéreos. No tengo miedo y sí curiosidad por saber cuál es mi nivel respecto a los mejores surfistas del mundo. Sé que va a ser difícil dar el pelotazo en mi estreno en el Challenger pero tampoco renuncio a nada. Me gusta la competición, me manejo bien en situaciones de estrés, y por qué no hacer un buen papel. Viajaré con Nadia Erostarbe, que también se ha clasificado para el Challenger, y su novio, con los que tengo buena relación y eso también ayuda al pasar tanto tiempo fuera de casa.
– ¿Está dando a entender que puede lograr el ascenso al CT, en el que solo Aritz Aranburu ha sido capaz de competir?
– No. Ahora mismo ni sé cuántos surfistas son los que terminan ascendiendo –son doce aunque puede ser alguno más–. Mi objetivo es poder dar mi nivel, no guardarme nada, y aprender todo lo posible para, quién sabe, quizás algún día poder dar el salto. Estoy con unas ganas terribles.
– ¿Qué le dice su aita y entrenador, el surfista Ibon Amatriain?
– Él está contento porque ve a su hijo feliz y en buena dinámica. Decidimos tomarme un año de descanso en los estudios hasta empezar la universidad el curso que viene y la apuesta ha salido bien. Espero arrancar la carrera de INEF con Magisterio en septiembre. Los dos tenemos claro que hay que seguir formándose.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión